En horas de la siesta fue reportado un choque frontal entre un automóvil Toyota IST y un camión semirremolque en el kilómetro 19 de la ruta PY04. En el lugar falleció un hombre que iba acompañado en el automóvil por una criatura que quedó gravemente herida.
Los intervinientes trataban de identificar al conductor fallecido cuando les llegaron rumores de que la esposa del hombre estaba desaparecida. El fallecido resultó ser el sargento militar Hugo Alberto Ibarra González (44), y el niño que lo acompañaba, su hijo, de 6 años.
Según versión del agente fiscal Víctor Encina, cuando llevaron al niño al Hospital Regional, preguntando supieron que la madre del chico se llamaba Marité Espinoza, que era enfermera del lugar y que corría versiones de que había viajado a Asunción; otros decían que se encontraba en Pilar. Finalmente pudieron confirmar que hasta el mediodía estuvo con otro de sus hijos, que se encontraba internado en el hospital.
Siempre, según la versión de los intervinientes, como no contestaba el teléfono y confirmaron su ubicación en Pilar, con la ayuda de una compañera de trabajo llegaron hasta la vivienda de la pareja, en el barrio Mbokajaty, donde la policía y los vecinos habían iniciado la búsqueda de la mujer. Cuando se apersonó la comitiva fiscal, llegó también el hermano de la víctima, quien fue el que observó que sobresalía la pierna de su hermana; el cuerpo de la mujer estaba escondido debajo de la cama. La inspección forense determinó que la mujer recibió un golpe en la cabeza, probablemente con un hacha sin mango y en otras partes.
La deducción de los investigadores es que posiblemente se trate de un feminicidio y suicidio, aunque esta hipótesis debe ser sostenida en los resultados de las pericias que deben realizar los investigadores.
De esta forma, dos niños quedaron huérfanos y ambos internados en el Hospital Regional. El menor, que sufrió el accidente con su padre, se encuentra grave y debe ser sometido a cirugía.
Además de los niños, el crimen conmocionó al barrio. La familia de la mujer quedó desconsolada.
“En estos tiempos en que tenía que ser un poco alegre, de visitas a las familias, se encuentran con esto; van a pasar un luto muy desagradable con esto”, reflexionó el agente interviniente