Por lo que se pudo observar la fuerza del viento solo afectó un sector recto que se extiende desde el barrio Remansito hasta el microcentro comercial, afectando las avenidas Alejo García, Bernardino Caballero, Pioneros del Este y Carlos Antonio López. Sobre esta última avenida un viejo árbol se tumbó en el paseo central, cerrando totalmente una mano para la circulación de vehículos.
La misma situación se repitió sobre la avenida Pampliega ubicada detrás de la sede la Municipalidad de Ciudad del Este. Al costado del portón trasero de la institución, un árbol se tumbó del interior para exterior destruyendo la muralla. Un poco más adelante, ya casi llegando a la avenida Eusebio Ayala, otro añejo árbol cayó por la muralla desde el interior de una propiedad, cerrando parte de Pampliega. La misma situación se observó en los alrededores de la Escuela N° 354, más conocida como Escuela Guazú.
En la plaza ubicada frente a la sede del Obispado, también cayeron varios árboles, también de gran porte. En frente, en el Parque Alejo García, dos árboles de gran tamaño cayeron al suelo, como si nada, por la fuerza del viento.
No se reportaron daños mayores, más que el cierre de ruta, destrozos de murallas. No hubo heridos ni daños en vehículos. Los vecinos del barrio, Juan Emilio O’Leary, incluso reportaron caída de granizos muy pequeños, por un corto tiempo. Frente al acceso a la zona primaria del Puente Internacional de la Amistad, se reportó la caída de un cartel publicitario.
La fuerza del temporal también afectó el suministro de energía eléctrica por más o menos una hora en un sector del microcentro. El fenómeno se reportó aproximadamente a las 19:30. “Fue breve pero muy fuerte. Acá en el microcentro y parte de nuestro barrio sentimos con mucha fuerza el viento que enseguida nos cortó la luz, pero por suerte volvió una hora después aproximadamente. Vientos de este tipo siempre nos asusta, porque aquí estamos rodeados de árboles muy grandes y siempre está el temor de que caigan sobre nuestras casas”, relató Néstor Benítez, vecino del barrio Juan Emilio O’Leary.
Benítez señaló que algo está pasando con los árboles que caen, algunos incluso sin la necesidad de ser afectados por el viento.