Por Martha Bazán
Una tendencia de moda y muy aceptada por los consumidores modernos es actualmente la utilización de guampas y termos revestidos en cuero. La creatividad, colores y diseños que presentan los artesanos en estos elementos marcan un estilo con clase y buen gusto.
Sin lugar a dudas, el tereré, más que una bebida típica paraguaya, es una pasión del pueblo. Antiguamente bastaba verter yerba mate en un vaso y agua fría en una jarra de aluminio para saciar la sed con esta bebida originariamente nuestra.
Hoy día no solo no pasó de moda esta costumbre tan típicamente paraguaya, sino que aparecieron otras variantes para los consumidores modernos que gustan acercarse mediante esta sana bebida a las nuevas tendencias y estilos que acompañan al buen gusto.
El mercado nacional ofrece una variada gama de termos y guampas revestidos en cuero y cuerina de colores que aparecieron como una alternativa tanto para el consumidor actual como para artesanos y diseñadores que trabajan en el rubro.
Francisco Sosa, artesano y propietario de “Artesanías Felicia”, de la capital del país, sostiene que lleva más de cinco años realizando forrados en cuero. Agrega que toda su familia sobrevive del rubro y que es una manera de crear fuentes de trabajo para vecinos de la zona.
“No me quejo de las ventas, a pesar de que este rubro tuvo gran aceptación en el mercado no es un artículo de primera necesidad y sólo lo compran personas de clase media para arriba por el precio que ello implica”, refiere.
DEMANDA. En los últimos tres años se ha incrementado la demanda en la elección de este tipo de productos, sobre todo en turistas y compatriotas que viajan al exterior y que buscan algo típico paraguayo para llevarlo como obsequio.
Un juego de termo con guampa incluida revestida en cuero cuesta 100 mil guaraníes, y es uno de los más accesibles. En tanto que aquellos que tienen un diseño más trabajado cuestan 180 mil y los grabados a láser con fotos de clubes deportivos están en 250 mil guaraníes.
Los pirograbados de nombres o siglas dependiendo del cliente se realizan al instante y sin costo adicional.
Finalmente, Francisco Sosa no quiso dejar pasar la oportunidad para estimular a la ciudadanía a consumir lo que el Paraguay produce, alegando que sus trabajos tienen calidad, originalidad y un estilo innovador...
Foto: Miguel Houdín