En este orden, señalan que cuando se produjo la suba general de precios de todos los combustibles en febrero pasado, el alcohol carburante pasó de G. 4.200 a costar G. 4.600.
Sin embargo, mencionan que, la semana pasada, se encontraron con la sorpresa de que el producto volvió a registrar una nueva suba, de G. 400 por litro, con lo cual su costo al público actual es de G. 5.000.
Consideran que estas subas no se justifican, a partir de que es un combustible que se produce netamente en nuestro país y no tiene nada que ver con la suba del precio de las naftas y del diésel a nivel internacional ni se ha escuchado que existan problemas de producción local.
No todos los emblemas comercializan el alcohol carburante puro. Ciertos emblemas venden el denominado alcoflex, que tiene una mezcla del 15% de nafta.
FORZADO. Por su parte, el empresario Blas Zapag, del grupo que administra Copetrol y Petrobras, apuntó que en el caso de ellos se vieron forzados a reajustar el precio del alcohol, debido a que la planta de producción que tienen está parada por refacciones y se ven obligados a pagar más caro el combustible de proveedores locales.
“Nuestra fábrica está parada, se está realizando una reingeniería total. Estamos comprando de Inpasa y nos subieron G. 1.000 por litro”, precisó.
Añadió que la mencionada empresa proveedora les manifestó que también se vieron obligados a aumentar debido a que el precio del maíz se duplicó.
Apuntó que esta situación se va a mantener mientras dure el reacondicionamiento de la planta de producción de alcohol que está en proceso y llevará su tiempo porque ya está algo obsoleta.
“Lamentablemente se tendrá que esperar a que termine el rebranding de la planta que quedó algo obsoleta” , enfatizó.
