Un misterioso hombre vestido de negro intentó trepar el alto muro del penal del Buen Pastor en la noche del domingo, alrededor de las 23, según datos oficiales de la comisaría 6ª metropolitana.
De acuerdo a los datos que se manejan a través del servicio de inteligencia de la Policía Nacional, desde hace un tiempo se maneja un plan de posible fuga de la condenada por secuestro Carmen Villalba.
En cuanto a lo ocurrido en la noche del domingo, una reclusa y un celador se percataron de que el desconocido trataba de ingresar dentro del presidio de hacia el sector de la avenida Mariscal López. Ambos gritaron y los agentes policiales y militares apostados en los alrededores del correccional corrieron hacia el lugar, pero cuando llegaron el desconocido ya había desaparecido de la escena, por lo que pidieron apoyo a la comisaría jurisdiccional, desde donde también se solicitó la presencia de los componentes de la Agrupación Especializada y de la FOPE.
Primeramente realizaron una gran batida policial por el arroyo Mburicaó y zonas aledañas al mismo, pero no se tuvo un resultado positivo, lo que hace presumir a los agentes que en las inmediaciones del presidio estuvieron esperando al sujeto y a la posible rescatada en algún vehículo y que tras abortarse el plan optaron por huir antes que ser aprehendidos.
INTERVENCIÓN. Ante la gravedad de los hechos, los agentes policiales solicitaron la presencia de la agente fiscal de sentencia, Celia Beckelman, quien se constituyó en el recinto carcelario y tras conversar con los intervinientes ordenó el ingreso de las fuerzas operativas dentro del presidio para un mejor cateo.
Todas las celdas fueron verificadas por los agentes y ya cerca de la una de la madrugada culminó este operativo, que por cierto no arrojó ningún resultado positivo.
Respecto al operativo y a la aparición del hombre intentando ingresar al penal de Mujeres, la fiscala interviniente explicó que desde hace tiempo venían manejando informaciones de que existe un plan de rescate de la condenada por secuestro Carmen Villalba.
“Esto llama mucho la atención y nos indica que debemos estar en permanente alerta para evitar que exista la fuga”, sentenció la representante del Ministerio Público.
Por otra parte, el fiscal Francisco Ayala, al igual que el juez de Liquidación y Sentencia Carlos Escobar, en más de una ocasión reiteraron los pedidos de reforzar el perímetro de seguridad de la casa del Buen Pastor como así también el traslado de la reclusa a otro lugar más seguro.
Hasta el momento solamente se cumplió con una parte del pedido, porque a más de la Policía, las Fuerzas Militares custodian las 24 horas las afueras del penal, pero en esta ocasión una interna y un celador se percataron de la presencia de la persona extraña que quería ingresar la presidio por un lugar indebido y también en horario prohibido.
Cabe señalar que Carmen Villalba está condenada a 18 años de cárcel por el secuestro de María Edith Bordón de Debernardi, ocurrido el 16 de noviembre de 2001 en el estacionamiento del Parque Ñu Guazú.
La captura de la misma se produjo durante un intenso tiroteo en una vivienda ubicada en el distrito de Lima, departamento de San Pedro, en fecha 13 de julio de 2000, de donde lograron fugarse Gilberto Setrini, Alcides Oviedo y otros componentes de la banda que secuestró a la señora de Debernardi, quien fue liberada tras estar por espacio de 64 días en cautiverio.
De mujer “topo” a secuestradora
El nombre de Carmen Villalba, oriunda de la ciudad de Concepción, saltó al tapete tras el frustrado intento del multimillonario robo en perjuicio del Banco Nacional de Fomento, sucursal Choré.
Este hecho se produjo en el año 1987, cuando un grupo integrado por Alcides Oviedo, Gilberto Setrini y otros más alquilaron una vivienda ubicada detrás del predio bancario, desde donde comenzaron a cavar un túnel de aproximadamente cincuenta metros que tenía como objetivo final llegar a la bóveda del banco estatal.
Se tenía planeado robar más de mil millones de guaraníes que debían ser depositados en el lugar para el pago a docentes y jubilados de las diferentes localidades del departamento de San Pedro. El grupo fue detenido pero luego liberado. Posteriormente la banda ejecutó el secuestro de María Edith de Debernardi, el primero ocurrido en el siglo XXI. Tras la liberación se la buscó intensamente hasta que fue capturada. Se fugó y volvió a caer en Ñemby tras un enfrentamiento.
Opinión
Sandra Quiñónez, Agente fiscal: “Es peligrosa”
“Desde todo punto de vista es una reclusa muy peligrosa y no se puede descuidarla. No debemos olvidar la forma en que fue capturada en Sanguina Cué. En medio de un intenso tiroteo se le agarró a ella, pero otros integrantes lograron escapar”, dijo la agente fiscal Sandra Quiñónez, refiriéndose al intento de rescate de Carmen Villalba.