23 abr. 2024

Stroessner kyhyjeha

Dr. Pedro Gamarra Doldán

Acaba de publicarse el libro de Mariano Damián Montero. Pocas veces se ha lanzado un escritor a la tarea de publicar un libro, y de 640 páginas, con fuentes de información, aparentemente, tan poco fértiles en principio.

Agapito Valiente es uno de esos hombres de la resistencia que citábamos en los años grises del duro orden. Vemos en él un alarido de alguien que se atrevió a desafiar la milicia hostil del régimen imperante (1954-1989), para descubrir nosotros al valiente ciudadano que era más que un hombre de resistencia. Era un ser que, originado en la laboriosa tarea de maestro de escuela, pasa a vivir en el profundo medio rural paraguayo, en Asunción, en la frontera con Argentina y en la lejana Moscú en los años de la Guerra Fría.

Este libro es una extensión inmensa sobre un tema apenas burilado, y es la historia elegida, difícil, del hombre que no teme sino a no hacer nada.

Cuando su vida transita, entre sus años de militancia social real (1950-70), el mundo sale de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), y se asienta en esa guerra gélida que abarcó todo el planeta y que se extendió al espacio, en esa lucha por el dominio del mismo y de la Luna.

Agapito Valiente era marxista. Más que de literatura, lo era en la praxis real, en la vida sufrida y en los espejismos cercanos a que se renuncian, para entrar en la vida del sueño, ya no personal, sino nacional.

Un partido internacional estaba tras él: El Partido Comunista, también paraguayo, que de sus fastos primigenios (1929-1939) se volvió, el libro lo señala, burocrático en sus acciones, contradictorio entre sus pretendidos dueños, supeditado a las dimisiones, según fuere el origen, ruso, chino o cubano.

Más que revolucionario de humilde sencillez, pareciera que toda la vorágine de los ideales humanos, e ideológicos existieran en nuestro humilde, apartado y arcano Partido Comunista. El libro permite conocer, en circunstancias controvertidas, a Óscar Creydt y a Obdulio Barthe, entre otros.

EL PARTIDO COMUNISTA PARAGUAYO.

Que poco gratificado sale este partido de este libro, en el escenario de las luchas nacionales. Del Ideario Nacional, en 1929; de la toma de la ciudad de Encarnación (1930); poco es lo que queda de la exégesis filosófica, de los dos opuestos personajes mencionados más arriba, de renombre social y formal. Ambos eran de la secta de familias opulentas en buen nombre y posición económica. Siendo así, es más fácil llegar a ser hombre de filosofía, de protección que le da su fama en el abolengo, aun de hombres de ideas opuestas a las usuales en el medio social. Se renuncia a poco y cuando los momentos de figurar en el país lo permiten (1946, Primavera Democrática; o 1947, en Concepción, en la Guerra Civil), son los que figuran.

Agapito Valiente Areco (1920-1970) nació en zona de la Cordillera, más frecuente vecino de Piribebuy. En la compañías Tape Guasu, 4 de Julio y Mariscal López, aún soporta la pobreza, el abandono y la sospecha que genera ser ese ser de lucha radical.

En esos lugares estuvo el poeta social-literario Herib Campos Cervera (1940-1946). De allí formó en unas treinta hectáreas la Colonia Campos, dedicada a crear una suerte de unión cooperativista. La Guerra Civil de 1947 la condenó a ser mera minifundista. Y a ser perseguido de las autoridades político-policiales de la zona.

Qué mal parado sale de este raconto la estructura superior de ese partido. Y cómo muchos de sus actos se conllevaban a sostener la actuación del partido, entonces en el Gobierno.

Ya lo dije al comienzo: El libro aunque extenso, se lee raudo y con fruición. Es el libro que siempre quisimos ver y leer, con acuciante investigación en bibliotecas, documentos que se sostienen en grado sumo, en los testimonios de personas que vivieron ese tiempo. Y ver a Agapito Valiente en su expresión familiar, escolar, campesina y militante.

El autor nos informa que la obra le llevó cinco años de trabajo. Ello es poco, si vemos que se internó en el país e hizo hablar y perdurar a los testigos y parientes de ese mítico ciudadano que fue Agapito Valiente.

Poco sabíamos y conocíamos de él, que no fuera la historia de su férreo luchar. Aquí encontramos en este libro la evidencia de que vivió una resistencia tenaz y valiente de guerreros que como él, no se rendían a la fuerza de las armas del Gobierno de turno.

Cuarenta años han pasado desde que murió Agapito Valiente Areco, y treinta desde que se implanto el derecho a las ideas propias. Recién ahora, por obra y estudio, de este destacado investigador argentino, podemos conocerlo en persona.

Agapito Valiente. Stroessner Kyhyjeha es un libro que contempla el testimonio real y acuciante de la valentía y la lucidez que debió tener un humilde pero gran compatriota; quien supo enfrentar casi solo las fortalezas de un régimen que se sostenía en la fuerza nacional y también extranjera.

Bien por este libro de redacción clara, legible y de buena investigación. Felicitaciones al autor por enseñarnos a ser más creyentes en nuestra vida y causas legítimas.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.