El Senado aprobó ayer un proyecto de declaración en el que repudia la violación de la libertad de expresión por parte del presidente venezolano, Hugo Chávez, y manifiesta su preocupación por “su política expansionista”.
El proyecto fue presentado por el senador colorado Alfredo Goli Stroessner, nieto del ex dictador Alfredo Stroessner.
Fue tratado por la Comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento, cuyos miembros recomendaron su aprobación al plenario.
El tratamiento durante la sesión fue rápido y sin objeciones.
En el proyecto se expresa la solidaridad con los numerosos medios de comunicación venezolanos que fueron clausurados por disposición de Chávez.
Se hace asimismo una recomendación a la OEA (Organización de Estados Americanos) para que, a través de sus organismos pertinentes, agoten las instancias administrativas y legales vigentes en Venezuela, a fin de restaurar la plena vigencia de la libertad de prensa y de expresión.
Instaron además a la OEA al fiel cumplimiento de su rol conforme a sus deberes de velar por el respeto a los derechos y a las garantías constitucionales de los ciudadanos de los países miembros, protegiéndola en su libertad, en su seguridad y en la no intromisión en asuntos internos de otros estados.
ANTICHAVISMO. La objeción hacia la política de Chávez en ambas Cámaras del Congreso es tal que el Ejecutivo tuvo que retirar el proyecto de adhesión de Venezuela al Mercosur ante un inminente rechazo.
En el Parlamento, la oposición es la que manifiesta abiertamente su temor a que el presidente Fernando Lugo emule la política de su homólogo venezolano.
El fuego cruzado entre Chávez y los parlamentarios paraguayos ya tiene antecedentes.
Meses atrás, Chávez había realizado fuertes acusaciones señalando que la ultraderecha paraguaya estaba preparando un golpe contra Lugo. En el Congreso se tomaron por aludidos y pidieron que se disculpe.