El Jenner Institute, fundado en 2005 y que es parte del departamento de Medicina de Nuffield de la Universidad de Oxford, ya está produciendo la vacuna diseñada y desarrollada por científicos de esa institución para distribuirla en diciembre, una vez testadas.
El instituto espera tener los resultados definitivos de su ensayo clínico para demostrar la eficacia de la vacuna a fines de octubre o inicios de noviembre. Fuentes del ente reconocen que “aún no hay resultados de la eficacia y no se sabe hasta qué punto protege” y precisan que se debe hacer “un estudio muy grande, de hasta 10.000 personas, para testearla”. Uno de los países donde se realiza el estudio es Brasil, actualmente el segundo del mundo con más casos.
ALEMANIA. La biofarmacéutica alemana CureVac recibió la autorización para un estudio en personas de una posible vacuna, informó ayer el Instituto Paul Ehrlich (PEI), competente en materia de vacunas y medicamentos biomédicos.
“La autorización es el resultado de una meticulosa evaluación del potencial perfil riesgo-beneficio de la posible vacuna. El ensayo de posibles vacunas en personas es un importante hito en el camino hacia la aprobación de vacunas seguras y eficaces contra el Covid-19”, señala el ente.
Es la segunda empresa alemana después de la biotecnológica BioNTech en recibir la autorización para probar en personas una posible vacuna. En ambos casos se trata de una vacuna RNA con información genética para la construcción de la proteína de espiga del CoV-2 en forma de ácido ribonucleico (ARN).
En la primera fase participarán 168 voluntarios sanos, de los cuales 144 recibirán la vacuna de CureVac. La dosis irá aumentando gradualmente para determinar la seguridad y tolerabilidad en general, así como para establecer la dosis adecuada para lograr una respuesta inmunológica contra el SARS-CIV-2 con la formación de anticuerpos.
El PEI agrega que, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se trata de la undécima autorización en el mundo para un ensayo clínico en personas de una posible vacuna. El Estado alemán invertirá 300 millones de euros en CureVac.
En tanto, el PEI autorizó en abril y mayo estudios con plasma de personas recuperadas tras contagiarse de Covid-19 para crear un potencial medicamento para tratar a enfermos de riesgo grave.
JAPÓN. Un consorcio de entes públicos y privados de Osaka (oeste de Japón) comenzará a probar en humanos una potencial vacuna a fines de junio, según anunciaron ayer las autoridades regionales.
Los test en humanos serán los primeros de este tipo hechos en Japón para desarrollar una posible vacuna contra el virus. El proyecto lo realiza la farmacéutica Anges en colaboración con universidades y hospitales de Osaka, como resultado de una iniciativa conjunta puesta en marcha en abril para desarrollar posibles fármacos y vacunas.
La vacuna se inoculará primero a obreros del hospital de Osaka este fin de mes, unas pruebas que irán luego a cientos de personas hacia octubre. De confirmarse la efectividad y seguridad del fármaco, se producirían unas 200.000 vacunas antes de fin de año.
CHILE. Una vacuna contra el SARS-CoV-2, que se desarrolla desde inicios de año en Chile, avanzó a la fase de ensayos preclínicos. El proyecto es uno más de las docenas que se realizan en el mundo con miras a producir en Sudamérica. Pese al buen ritmo del proyecto, la posibilidad de una vacuna real se alargaría al menos dos años, siempre que la evolución del estudio no tenga contratiempos.
Argentinos desarrollan suero anti-Covid-19 en laboratorio
Un suero terapéutico para tratar enfermos de Covid-19, hecho en Argentina, demostró en pruebas in vitro la capacidad de neutralizar al virus según revelaron medios bonaerenses. Es un suero hiperinmune anti-Covid-19 para inmunización pasiva, fruto del trabajo de una articulación de entes públicos y privados.
En breve iniciarán la fase de ensayos en pacientes a través de la administración de anticuerpos a pacientes contra el agente infeccioso, produciendo su bloqueo y evitando que se propague. El suero actuaría de modo parecido a los tratamientos por envenenamientos por picaduras de serpientes y alacranes, intoxicaciones por toxina tetánica, exposición al virus de la rabia, entre otros.