Uruguay no pudo asegurar matemáticamente la clasificación a cuartos de final de la Copa América y se vio sorprendida por una selección japonesa que le obligó al máximo para sumar al menos un punto, tras ir en dos ocasiones en desventaja (2-2).
En un partido de ida y vuelta, probablemente el más vistoso desde el comienzo de la Copa, Uruguay encontró mucha más oposición de la esperada. La Celeste se vio obligada siempre a remontar. Lo hizo en el primer tiempo, gracias a un penal ejecutado por Luis Suárez, que equilibró el gol inicial de Koji Miyoshi. Y también tras el descanso, porque Miyoshi volvió a marcar y solo el poderoso juego aéreo de Josema Giménez le permitió empatar a la salida de un córner.
Con este empate, los charrúas quedan con 4 unidades, mientras que los nipones sumaron su primer punto, el cual los mantiene con chances de pelear por un lugar en la próxima etapa.