El general Balbuena tendrá justamente a su cargo el destacamento militar de la capital del Departamento de Amambay. El papel jugado por los militares en la fuga de los reclusos del penal está bajo investigación, ya que desde setiembre pasado hay militares custodiando las afueras de esta y otras penitenciarías.
De acuerdo a los datos de los investigadores de la fuga, los militares apostados frente a la cárcel no representaron obstáculo alguno para los reclusos que salieron de la cárcel, muchos de ellos por el mismo portón de la institución.
El cambio del general Barrientos Báez se suma a una larga lista de destituciones y renuncias que se dieron tras el escape de los presos. El director general de Establecimientos Penitenciarios, Joaquín González, fue destituido, así como todas las autoridades vinculadas a la Penitenciaría de Pedro Juan Caballero.
Tras la fuga, el presidente Abdo Benítez dispuso que más militares y policías resguarden las cárceles del Norte del país y Ciudad del Este.