15 dic. 2025

Rusia advierte que conflicto bélico puede degenerar en guerra atómica

Moscú critica las provocaciones de los países occidentales a los que acusa de participar casi directamente en la guerra que libra Rusia contra Ucrania, que ahora prepara otra contraofensiva.

Rusia advirtió este jueves de que existe un “enorme” riesgo de que un conflicto con armas convencionales entre potencias atómicas degenere en una guerra nuclear.

En caso de una guerra con medios convencionales entre potencias nucleares “el riesgo de que degenere en una guerra nuclear es enorme”, afirmó en rueda de prensa el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.

Por eso, añadió, Rusia no solo suscribe la inadmisibilidad de una guerra nuclear, sino también llama a impedir cualquier conflicto armado entre países que poseen esa clase de armamento.

Lavrov recordó que los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y Estados Unidos, Joe Biden, firmaron en junio de 2021 una declaración acerca de que no puede haber vencedores en una guerra nuclear, documento que más tarde cinco potencias nucleares suscribieron.

“Como ya he dicho, nosotros estamos dispuestos a ir más allá y decir no solo que no se puede desatar una guerra nuclear, sino que también es inadmisible cualquier guerra entre potencias nucleares”, subrayó.

PROVOCACIONES. El jefe de la diplomacia rusa indicó que Moscú observa con preocupación la retórica de Occidente, que acusa a Rusia de preparar provocaciones con el empleo de armas de destrucción masiva.

“Pero Occidente mismo, Estados Unidos, Gran Bretaña o Francia, hace todo por incrementar su participación prácticamente directa en la guerra que libran contra Rusia por medio de los ucranianos. Es una tendencia peligrosa”, enfatizó.

Lavrov indicó que debatir con EEUU sobre estabilidad estratégica sin tomar en cuenta la situación Ucrania no es posible.

“Para todos, creo, está absolutamente claro que abordar la estabilidad estratégica sin tomar en cuenta todo lo que actualmente ocurre en Ucrania es imposible”, recalcó.

Explicó que el Gobierno de Kiev se ha puesto como objetivo “derrotar, si no destruir, a Rusia en el campo de batalla”.

"¿Cómo el objetivo de derrotar a Rusia no puede tener importancia para la estabilidad estratégica?”, inquirió Lavrov, que recalcó que Rusia es uno de los actores clave en este ámbito.

El ministro indicó que no se puede separar el conflicto de Ucrania del debate sobre estabilidad estratégica.

“Nos dicen (los estadounidenses): de Ucrania hay que hablar con los ucranianos, cuando quieran los ucranianos, y que nosotros debatamos sobre armamento nuclear y estabilidad estratégica. Esto es, por lo menos, ingenuo”, dijo.

Ucrania prepara una “poderosa” contraofensiva en el campo de batalla y presiona a Occidente para que le entregue más sistemas antimisiles, como los Patriot, ante los bombardeos contra infraestructura civil por parte de Rusia.

Rusia, entretanto, continúa su ofensiva en localidades al sur y noreste de Bajmut, en la región de Donetsk, pese a su poco valor operativo y estratégico.

“Estamos analizando las intenciones de los ocupantes y estamos preparando una contramedida, una contramedida aún más poderosa” que las reciente en las regiones de Járkov y Jersón, señaló el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, sin revelar más detalles.

Ucrania está contraatacando actualmente en la región de Lugansk, donde ha recuperado 13 localidades, y está inmersa en una operación para liberar la península de Kinburn, a donde se retiraron las tropas rusas tras replegarse de la región sureña de Mykolaiv y el tercio norte de Jersón.


13
localidades de la región de Lugansk ha retomado Ucrania tras el repliegue de las tropas rusas a Mykolaiv.