Rice es esperada en Israel esta tarde, y comenzará sus gestiones con un encuentro de trabajo en la ciudad de Herzliya, al norte de Tel Aviv, con su colega israelí, Tzipi Livni.

La secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, junto al primer ministro israelí Ehud Olmert (d), durante la reunión que mantuvieron en la residencia de Olmert en Jerusalén, en agosto pasado. EFE | Ampliar imagen
El viernes y el sábado se entrevistará también con otros mandatarios israelíes y palestinos, con vistas a la reunión del domingo en Egipto del Cuarteto de Madrid para poner por escrito los avances logrados este último año.
El diario Haaretz informa hoy de que Rice tratará de que las negociaciones de paz que Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP) comenzaron hace casi un año en la conferencia de Annapolis no se diluyan como consecuencia del cambio de administración en Washington.
Y de dejar al próximo presidente, Barack Obama, un “proceso viable” con el que poder cumplir la visión del saliente George W. Bush de dos estados -uno israelí y otro palestino- para dos pueblos.
En la conferencia de Annapolis se fijó de plazo para un acuerdo el período que restaba a Bush en la Casa Blanca, objetivo inalcanzable en las actuales condiciones políticas en Israel, donde se celebrarán elecciones anticipadas el 10 de febrero.
No obstante, sí ha habido algunos logros importantes en las conversaciones -por ejemplo, sobre un canje de territorios.
EEUU, y con él los otros tres miembros del Cuarteto -la Unión Europea, Rusia y la ONU-, no quieren que se pierdan estos acuerdos parciales y que en el futuro halla que empezar de cero.
Por ello, el Cuarteto celebrará el domingo una cumbre en Egipto con las dos partes involucradas, en la que se analizarán los progresos y se redactará un documento, en principio ambiguo, sobre el estado de las negociaciones.
Ni Israel ni la ANP desean que se pongan por escrito las concesiones que ya han hecho, y en sus entrevistas de hoy al sábado tratarán de alcanzar con Rice una fórmula de documento sobre el proceso.
Además, afirma el Haaretz, Rice “quiere presionar a las dos partes para que sigan negociando” y, por lo menos, tener una propuesta de cómo avanzarán después del 20 de enero.