Paraguay está ante un escenario de pérdida de la dinámica del crecimiento económico-comercial, con la consecuente disminución notable de la capacidad de consumo del mercado local y una caída directa de competitividad, ventas y prestación de servicios, en sectores claves de nuestra economía.
La caída del consumo alcanza un -30% acumulado, así como la caída en la producción, precios internacionales de los commodities agrícolas, pecuarios y nuestra exportación. Además del incremento del precio de los combustibles, la logística, el costo de pasajes en la movilidad urbana e interurbana y la mayor parte de los insumos para la producción de todos los sectores económicos.
La devaluación del guaraní frente al dólar de los EEUU, que está próximo a una cotización de G. 6.400 por unidad de dólar, que además se puede constatar una brecha de precios de más de G. 300 por dólar; y esto ante una situación de informalidad, contrabando, evasión y elusión.
Es de fundamental importancia que el dólar encuentre su equilibrio en una cotización más adecuada a los presupuestos en los que iniciamos este año, mucho más cerca de los G. 5.900 por dólar. La especulación cambiaria debe ser eliminada, teniendo en vista que nuestro país tiene importantes reservas monetarias que se constituyen en sólidas herramientas para mantener la estabilidad macroeconómica.
Asimismo, es imprescindible que la política presupuestaria (el gasto), en respuesta adecuada a nuestra contribución tributaria (los impuestos), se concentre plenamente en mejorar la calidad del gasto público que necesariamente deba atender la demanda de entrega oportuna y eficiente de servicios básicos e infraestructura social.
No es el momento ni es oportuno aumentar los impuestos, hasta tanto se hayan agotado los esfuerzos por ampliar la base tributaria evitando que se siga eludiendo y evadiendo impuestos, al tiempo de mejorar la gestión y la calidad del gasto público. Es necesario llamar la atención de que no es conveniente, ni es inteligente, así como es inadecuado incrementar los impuestos y crear nuevas tasas fiscales que afectarán de manera negativa al desarrollo económico con justicia social que como ciudadanos paraguayos deseamos todos.