El presidente Mario Abdo Benítez pidió a Carlos Amarilla que presente su renuncia al cargo de asesor político. Apenas un mes de su nombramiento ahora se aguarda su designación como consejero de Itaipú.
Salió al paso de los cuestionamientos que pesan en su contra por la investigación en el caso de irregularidades detectadas durante su administración como gobernador del Departamento Central. Afirmó que está esperando la sentencia la próxima semana.
“Soporto una imputación por una causa que es estrictamente política”, remarcó sosteniendo que el trasfondo real es que se ganó esa investigación debido a que se opuso a la enmienda para forzar la figura de la reelección presidencial para Horacio Cartes.
Sostuvo que la Fiscalía realizó su trabajo y aseguró que no tiene ninguna responsabilidad de las acusaciones que lanzaron en su contra. “Nuestra conducta está fuera de toda sospecha. Hemos pulverizado el informe que dio lugar a la imputación”, dijo.
“El presidente es el que tomará la decisión. Me dijo que me daría una misión”, significó sobre su nombramiento en Itaipú como consejero.
Amarilla había sido beneficiado con medidas alternativas a la prisión preventiva en relación a la imputación por supuesta lesión de confianza. Corresponde a la investigación realizada en su contra por la supuesta irregularidad en la administración que tuvo como ex gobernador del Departamento Central, por la suma de G. 9.355 millones.
La audiencia se realizó ante la magistrada de Garantías Rosarito Montanía, quien le concedió la libertad ambulatoria.
Ofreció un inmueble valuado de G. 2.497.826.600, como caución al Juzgado.