Wallace detalló que el paquete incluye “sistemas de armamento ligero antitanques” y resaltó que todos los equipos son de “corto alcance y tienen una utilidad claramente defensiva, por lo que no son una amenaza para Rusia”. El paquete se suma a la colaboración militar que ya acordaron el Reino Unido y Ucrania el año pasado, que englobaba, entre otros aspectos, programas de entrenamiento y la construcción de varios buques armados. El ministro de Defensa indicó que personal británico se desplazará a Ucrania durante un corto periodo de tiempo para poner en marcha el nuevo armamento y llevar a cabo tareas de formación.
Ben Wallace afirmó al mismo tiempo que ha invitado a su homólogo ruso, Serguéi Shoigú, a visitar Londres en las próximas semanas. Expresó su deseo de utilizar los contactos bilaterales para avanzar en un diálogo “constructivo y de buena fe” sobre la tensión en la frontera de Ucrania, donde Moscú ha situado a decenas de miles de efectivos militares, aunque recalcó que la postura británica sobre el conflicto es muy clara. EFE