Hoy se cumple una semana desde que los miembros de la Coordinadora Nacional Intersectorial (CNI) están acampando frente al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y sus alrededores, en Asunción.
Se prevé que los labriegos vuelvan a movilizarse por las calles adyacentes, algo que será dificultoso, teniendo en cuenta que el perímetro está fuertemente reforzado con agentes de la Policía Nacional.
El miércoles pasado fue la última vez que hablaron con el Gobierno, en una reunión liderada por el actual ministro del MAG, Denis Lichi. El problema fue que no llegaron a un acuerdo sobre el plan de reactivación productiva tratado, porque la CNI exige que se aplique su propuesta, que contempla una inversión de USD 40 millones en cuatro años. El ministro dijo que no se cuenta con ese dinero.
Pero Lichi no es el primer secretario de Estado que tuvo que atender el reclamo del grupo que reúne a ocho organizaciones, entre las que se destacan el grupo de los cañicultores y el Movimiento Agrario y Popular (MAP). Desde el 2016, los miembros de la coordinadora vienen yendo y viniendo a Asunción y uniéndose a otros grupos, como los cooperativistas y los indígenas, para dar mayor fuerza a su reclamo.
Pasaron dos gobiernos, el de Horacio Cartes y, ahora, el de Mario Abdo Benítez –ambos colorados– y varios acuerdos de por medio (ver infografía). La lista de ministros que se encontraron con los reclamos de la CNI se inicia con Juan Carlos Baruja, Marcos Medina y Luis Gneiting, del anterior gobierno, y el actual, Denis Lichi.
Dinero. En cuanto a dinero, no existen datos consolidados de ninguna de las partes. En el 2017, cuando Juan Carlos Baruja era ministro, se aprobó un fondo de USD 40 millones en bonos soberanos que serían utilizados mitad y mitad entre el Crédito Agrícola de Habilitación (CAH) y el MAG.
La primera institución mencionada dispondría de ese dinero para otorgar nuevos créditos y para efectivizar la refinanciación de las deudas.
El resto de los bonos –USD 20 millones– debía ser invertido a través del MAG. Lo último informado de manera oficial acerca del uso de este dinero fue la entrega de tractores a la CNI, durante la administración de Marcos Medina. En aquella ocasión, se informó que la compra de las maquinarias significaría una inversión de USD 3,1 millones.