Los diputados de la oposición defendieron el proyecto señalando que las empresas de transporte actúan como carteles que manejan el transporte público. Antonio Buzarquis se refirió a la propuesta como un proyecto antichantaje. “Cuando a ellos (Cetrapam) se les antoja dejan sin transporte a la ciudadanía. Se juega con la gente y la situación de la ciudadanía”, dijo.
También el diputado de Patria Querida, Sebastián Villarejo avaló la aprobación del proyecto y recordó que la Cámara Baja se declaró “provida” y pidió que se “baje a tierra”, señalando que mucha gente que utiliza el servicio de transporte público sale de madrugada para poder utilizar el servicio y vuelve de noche sin tener contacto con sus hijos. Indicó que el presidente Mario Abdo Benítez “habló de grandezas en su informe de un puente absolutamente innecesario cuando lo que se necesita es invertir en un mejor transporte público y con ese dinero puede hacerlo”.
Los votos colorados se inclinaron en contra del proyecto, argumentando que los vehículos podrían tener problemas mecánicos arriesgando a los pasajeros. También dijeron que las empresas ya restablecieron el servicio que de a poco está mejorando.