La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia confirmó la pena de 20 años de cárcel para un guardia de seguridad que mató al dueño de la empresa donde trabajaba, porque le descontaron del salario los gastos de reparación de una radio.
La resolución afecta a Odilón Alegre, quien fue encontrado culpable de matar de dos disparos de arma de fuego a Juan Ángel Caballero Irala (46), propietario de la empresa Compañía Paraguaya de Seguridad SRL.
Ocurrió el 27 de agosto del 2013, tras una discusión en la estancia Pozo Azul, propiedad de la Ganadera Alborada SA, ubicada en Villa Hayes, Chaco paraguayo.
Los ministros Luis María Benítez Riera, Miryam Peña y Sindulfo Blanco, declararon inadmisible el recurso planteado por la defensora Pública Blanca Lila Martínez, por no cumplir con los requisitos formales.
La defensa había recurrido el fallo dictado el 11 de octubre del 2016 por el Tribunal de Apelación Multifueros de Villa Hayes.
A su vez, el fallo confirmó la sentencia dictada en el juicio oral el 7 de julio del 2016, por los jueces de Villa Hayes.
En su argumentación, los ministros dicen que la recurrente no ha podido establecer cuál fue la garantía constitucional que ha sido lesionada o vulnerada con actos procesales concretos.
Firme. De esta manera, los miembros de la Sala Penal declararon inadmisible el recurso planteado por la defensa, quedando firme la condena de 20 años de cárcel, dictada por el tribunal de Villa Hayes.