El ex presidente ecuatoriano Rafael Correa, que calificó ayer de persecución política el llamado a juicio por una Corte de su país, presentó en junio una solicitud de asilo en Bélgica, indicaron dos fuentes cercanas al caso.
La solicitud de asilo se presentó el 25 de junio, días antes que la justicia ecuatoriana ordenara prisión preventiva y solicitara a Interpol la difusión de una circular roja contra el ex mandatario de 55 años, en el marco del llamado caso Balda. Por este caso, la jueza Daniella Camacho, de la Suprema Corte de Ecuador, lo llamó a juicio por su presunta participación en el secuestro de Fernando Balda, un político opositor, en 2012 en Colombia, que la policía de aquel país frustró.
Desde Bélgica, país de su esposa, Correa niega cualquier implicación en los hechos, denuncia la falta de imparcialidad de la justicia y acusa a su vicepresidente de 2007 a 2013 y actual jefe de Estado, Lenín Moreno, de orquestar un complot en su contra. “Como no nos pueden ganar en las urnas, como no nos pueden derrotar, buscan todas estas excusas tremendamente graves, es una persecución política”, aseguró en Bélgica, donde reside. El ex mandatario socialista de 2007 a 2017, que siempre ha defendido su inocencia, solo podrá ser enjuiciado si es capturado o si se presenta ante el tribunal, pues la ley impide que sea juzgado en ausencia por ese delito castigado con hasta siete años de cárcel. AFP