La amenaza se produce justo cuando el G7 y la Unión Europea (UE) barajan diferentes medidas para contrarrestar el encarecimiento de las tarifas del gas ruso, que superan los 3.000 euros por cada mil metros cúbicos.
CRUDO INVIERNO. Rusia “no suministrará nada si va en contra de nuestros intereses, en este caso económicos. Ni gas, ni petróleo, ni carbón”, agregó.
Putin insistió en que el Krem-lin tiene intención de cumplir con sus compromisos, pero si alguien intenta imponerle su voluntad al margen de los contratos adquiridos, advirtió que responderá como en el famoso cuento ruso sobre el zorro y el lobo, en el que el primero invita al segundo a pescar metiendo la cola en un agujero de hielo en el río y al final lo pilla congelado por ingenuo.
“¡Congélate, congélate, cola de lobo!”, recitó, en alusión a los europeos. No dudó en considerar una “tontería” la iniciativa de limitar el coste del gas suministrado por el consorcio estatal Gazprom, aduciendo que eso “únicamente provocará un aumento de los precios”.
PAPA PIDE PARAR LA GUERRA. El papa Francisco volvió a recordar el conflicto en Ucrania, lamentó que se está viviendo una guerra mundial y pidió a todos que la detengan, al final de la audiencia general celebrada en la plaza de San Pedro. “¡Hoy estamos viviendo una guerra mundial, detengámonos por favor!”, expresó el Pontífice, quien pidió confiar a la Virgen las víctimas de todas las guerras “y en especial a las de la querida población ucraniana”.
Como cada miércoles desde que comenzó el conflicto, el Papa, al final de la audiencia, volvió a recordar a la “martirizada Ucrania” e instó a que, “ante todos los escenarios de guerra de nuestro tiempo, cada uno que sea constructor de paz”. También pidió que se rece para “que en el mundo difundan pensamientos y proyectos de concordia y reconciliación”. EFE