El diputado liberal Celso Kennedy manifestó que la garantía de acceso a la tierra debe ser para todos los paraguayos. “La Constitución Nacional establece que la propiedad privada cumple una función económica y una función social y en ese contexto, debe estar garantizada para que sea accesible a todos los paraguayos. Por eso mismo, el propio Estado debe otorgar por ley la condición de dominio caso por caso para que sea inviolable”, apuntó.
El parlamentario señaló que, en primer lugar, se debe identificar la tierra, su límite y contenido. En segundo lugar, identificar al propietario legítimo por cada finca identificada. Luego establecer las condiciones y usos para la seguridad social y ecológica y, por último, dar protección para que sea inviolable.
“Esta ley contribuye en el último aspecto, pero no aporta nada para los tres primeros, principales causantes de la intranquilidad social. Mientras se trata imparcialmente el problema, seguirá su politización y obviamente ilusionar a la gente por un lado y el dominio irregular de algunos por el otro lado, dependiendo de qué lado está del poder”, sentenció.
Por su parte, el también liberal Pastor Vera Bejarano puso en realce la gran desigualdad en la distribución de la tierra.
“El 93,7% de las tierras cultivables del Paraguay está en manos de 13 personas aproximadamente y, el 6,3%, en manos de 280 familias, aproximadamente. Estas son menos de 50 hectáreas, gran parte de los miembros de la agricultura familiar campesina”, lamentó.
En el Senado, el Frente Guasu sostiene que el objetivo es blanquear las tierras malhabidas.
La Cifra
93,7%
de la tierra corresponde a fincas medianas y grandes, según información del Censo Agropecuario Nacional.