“Para qué, por ejemplo, tenemos una fábrica de caña (...) Conceptualmente, estoy de acuerdo con que deberíamos desprendernos de algunos activos, que no implica solamente desprendernos de esas propiedades. Dicho eso, tampoco tenemos que salir a rematar esos bienes”, indicó.
Asimismo, aseguró que el contexto actual no es el más adecuado para llevar a cabo este tipo de iniciativas, considerando que el mercado está sumamente deprimido como consecuencia de la pandemia y esto afecta negativamente desde el punto de vista de los vendedores.
Igualmente, señaló que los procesos de venta de activos deben realizarse con la mayor publicidad y transparencia posible. Puso como ejemplo lo sucedido con la estancia La Patria y cuestionó: “¿Vamos a empezar a vender de manera oculta las cosas? Creo que ese no es el camino”.
Finalmente, refirió que es fundamental conocer en qué se pretende gastar los recursos extra generados por esta vía.