El presidente del gremio destacó que el Presupuesto General de la Nación (PGN) 2018 fue tratado de manera irresponsable y desprolija, hasta en los trámites parlamentarios básicos, lo que constituye motivo de preocupación, sumándose al veto total del presupuesto actual, “para conformar una imagen muy poco seria y confiable” (del país).
Para el gremio de importadores, es necesario evitar que lo político -es decir la coyuntura electoral- “embarre” la economía. Los empresarios nucleados en el CIP sostienen que no puede concebirse que los propios legisladores violen una ley que ellos mismos han sancionado, con el aplauso de la ciudadanía, catalogando esto como una aberración inadmisible.
En cuanto a la seguridad, Carrizosa destacó que no se pude ocultar la preocupación en esas cuestiones, ya que cada vez más la ciudadanía y el desarrollo de la economía del país se ven afectados por la violencia generada desde el narcotráfico, el EPP, la delincuencia común y la corrupción policial. “Las fuerzas del orden ni la Justicia demuestran celo por acabar con estos flagelos, y hasta hay signos de colusión y complicidad con los malvivientes”, resaltó en su discurso.