El procesado es F.S.M., un suboficial primero de Policía que cumplía funciones en la Comisaría 8ª, Metropolitana, quien fue acusado de abuso sexual en niños.
En forma unánime, las juezas Olga Ruiz, Víctor Medina y Arnaldo Fleitas aplicaron la nueva ley, donde la pena mínima para estos casos es de 20 años de prisión y la máxima de 30 años.
En el juicio oral, los fiscales Giovanni Grisetti y Mercedes Caniza solicitaron la pena de 28 años de cárcel.
Según los agentes, se probó en el juicio que el policía se hizo amigo de la familia y con ello, en confianza, incluso se quedaba a solas con el menor, donde abusaba sexualmente de él.
Es más, esto se comprobó con la declaración de la sicóloga Claudia Penayo y la médico forense.
La defensa sostuvo la inocencia del policía y solicitó la absolución de culpa y reproche del mismo. El agente cambió varias veces de versión en el juicio oral.
La sentencia se dio luego de que el juicio se suspendiera en cinco ocasiones. Ahora, la defensa tiene la posibilidad de apelar la resolución.