La presentación se basa en el hecho de que en marzo del 2018 vence el contrato con la empresa Ivesur, que es la única encargada de hacer esta tarea, por lo que consideran que se debe evitar que los controles queden en la nada.
Para ello, los ediles proponen a través de una minuta la creación de un registro de talleres que se encargue de la identificación e inspección de las condiciones mecánicas y reglamentarias de los automotores en general que circulan dentro de la capital.
Indican que los interesados en formar parte del mismo deberán responder a un llamado público de la Intendencia, cumpliendo los requisitos que serán establecidos en la convocatoria. En ese sentido, aclara que no podrán participar firmas o personas físicas o jurídicas que tengan demandas o litigios con la institución comunal.
Finalmente, expresa que para la obtención de la patente municipal de rodados deberá contarse previamente con la ITV, siempre que se aprueben los estándares técnicos de seguridad mínima fijados en la Ordenanza General de Tránsito.