Miles de personas marcharon ayer rumbo a la sede del Congreso en Valparaíso, a 120 km al oeste de Santiago, en la mayor concentración en esta región en varias décadas, siguiendo la multitudinaria concentración que reunió a más de un millón de personas en la capital el viernes.
Varias columnas de manifestantes coparon la avenida España, la costanera que une las ciudades de Viña del Mar y Valparaíso, portando banderas chilenas y exigiendo cambios profundos al modelo económico chileno.
“La fortaleza del movimiento social que se tomó las calles fue su transversalidad y carácter pacífico y constructivo. Nuestro llamado es que en Valparaíso, ¡siga siendo así! Hoy más que nunca ante el fracaso de estrategia de seguridad del Gobierno que no evita saqueos e incendios”, dijo Jorge Sharp, alcalde de Valparaíso.
En el frontis de la casa de gobierno en Santiago, un millar de ciclistas se congregaron para gritar a coro: “Piñera, escucha: ‘ándate a la chucha (vete al diablo)”. Y en el parque O’Higgins de Santiago, unas 15.000 personas se congregaron sin que se registraran incidentes en un acto cultural, denominado El derecho de vivir en paz. AFP