22 jun. 2025

Paró la lluvia de comidas, florecieron los animales

Por Sergio Cáceres Mercado

Foto: UH Edicion Impresa

Foto: UH Edicion Impresa

caceres.sergio@gmail.com

Esta segunda parte de Lluvia de Hamburguesas empieza exactamente donde terminó la primera. Por lo tanto, no hay respiro para Flint y sus amigos; apenas termina de solucionar un problema, aparece otro peor y que envuelve sus orígenes como inventor. Esta continuación sin descanso exige para los que gustamos de los pequeños detalles que uno recuerde exactamente las características de cada personaje y otras minucias de la primera parte.

El tipo de humor más caricaturesco -por llamarlo de alguna manera- sigue dando el tono particular a este nuevo capítulo. Esto hace que el público al que está dirigido sea para los más pequeños y a lo máximo llegando a algunos que están entrando en la pubertad.

Este sector del público puede encontrar un poco confuso la marea de figuras nuevas que aparecen a cada momento como parte de la historia principal. Es que la máquina de Flint ha creado todo un ecosistema con muchos seres vivos que son una especie de híbridos entre animales, plantas y -por supuesto- comida. Acá la creatividad de los realizadores se pone a prueba, y creemos que salen airosos.

Sin embargo, a la parafernalia de figurillas le acompaña una trama relativamente simple. Ya en un principio se aclara quién es el nuevo malvado, por lo que las aguas se dividen para que no quepan dudas. Este primer estreno de la temporada de vacaciones no está mal, pero esperemos que vengan mejores títulos.