El informe regional de desarrollo humano 2021 Atrapados: Alta desigualdad y bajo crecimiento en América Latina y el Caribe, del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), refleja los problemas sociales, políticos y económicos de la región que se acentuaron con la pandemia.
“América Latina y el Caribe (ALC) se encuentran en una trampa de desarrollo. A pesar de décadas de progreso, mucho del cual podría desaparecer con la pandemia del Covid-19, dos características de la región se han mantenido en gran medida inalteradas: la alta desigualdad y el bajo crecimiento”, señala parte del documento.
Paraguay lidera o está entre los primeros lugares de países donde se reflejan las desigualdades. Por ejemplo, alcanzó el 95% en la proporción de personas que creen que su país está gobernado en beneficio de los intereses de unos pocos.
En promedio, la ciudadanía de ALC sabe en gran medida lo desigual que es la distribución del ingreso y una proporción considerable de personas (el 81%) cree que la distribución del ingreso es injusta. La proporción asciende a más del 90% en Chile, Paraguay y Venezuela.
El informe también menciona que la inestabilidad del crecimiento está vinculada factores como: los precios internacionales de los commodities y las condiciones financieras internacionales que no son estables y los cambios en las políticas fiscales y monetarias domésticas.
INEFICACES. El Foro Económico Mundial pide a los encuestados que califiquen la eficacia de las políticas para garantizar una competencia justa con una puntuación de entre 1 (ineficaces) y 7 (sumamente eficaces). Haití, Venezuela y República Dominicana obtienen una puntuación inferior a 2,5.
Haití es el país con peor puntuación del mundo según esta medición, y ocupa el último lugar de los 137 países encuestados. Nicaragua, Paraguay y Argentina le siguen de cerca con puntuaciones inferiores a 3,0 y clasifican también en el límite inferior de la distribución.