Mencionó que se presentaron elementos que acreditaban haber sido sometidos a torturas, y aunque dice que tuvo en cuenta el fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, hubo pruebas confidenciales.
CULPA A POLICÍA. El fiscal de Asuntos Internacionales, Manuel Doldán, culpa a la Interpol Internacional por la huida de Arrom, Martí y Colmán, de Uruguay a Finlandia. Los mismos fueron acusados de secuestrar a María Edith Bordón, en noviembre del 2001 en Asunción.
“El código rojo de la Interpol se hallaba levantada y no se pudo revertir a tiempo en España, por eso Arrom, Martí y Colmán pudieron abordar el avión rumbo a Finlandia, aunque estuvieron demorados”, explicó.
En agosto de 2003 los tres abandonaron Paraguay un día antes de ser sometidos a juicio oral por secuestro, y huyeron al Brasil donde obtuvieron el estatus de refugiados. Sin embargo en junio pasado la Conare de Brasil levantó el estatus, decisión que fue apelada, y posteriormente confirmada por el ministro de Justicia, Sergio Moro.