El grupo europeo es un líder en la industria de la celulosa y el papel, con centros de producción en Alemania, Estonia y Austria, donde se encuentra su sede principal. “Estamos muy contentos de unirnos a este proyecto innovador para la producción forestal y de celulosa sostenible en Paraguay”, dijo el director general del nuevo inversor, Sebastián Heinzel.
El acuerdo sienta las bases para que el holding austriaco, uno de los productores de celulosa y papel más importantes de Europa Central y Oriental, se convierta en un inversor estratégico de capital en Paracel. La planta, que empezará a construirse en el próximo semestre, demanda unos USD 4.000 millones de inversión.
“No podíamos haber encontrado un socio mejor que Heinzel para hacer realidad esta visión del futuro de Paraguay”, afirmó, por su parte, Blas Zapag, titular del grupo empresarial local sobre el arribo del capital austriaco, mientras que Per Olofsson, representante del cofundador de Paracel y promotor del proyecto, Girindus Group, de Suecia, mencionó que ahora se completó el equipo de profesionales que se necesitaban y que Paracel ya está preparado para avanzar al siguiente nivel.
De acuerdo con Heinzel, empezaron importantes obras en el sitio de la planta industrial, en la ciudad de Concepción, además de poner en marcha programas sociales y proyectos de conservación de bosques nativos. Hasta el momento forestó 16.000 hectáreas, pero la idea es llegar a más de 180.000 hectáreas con tierras propias. Las proyecciones apuntan a una producción de 1,8 millones de toneladas de celulosa al año.
Uno de los mayores productores de papel de Europa Central y Oriental acordó convertirse en un inversor estratégico de la planta que empezará a operar en tres años en el Norte del país.
El Norte se perfila como polo industrial
Además del proyecto Paracel, crece en la misma zona Cementos Concepción, del Grupo Cartes.
También hay dos frigoríficos pertenecientes a las multinacionales Minerva y Concepción, que con sus diferentes plantas concentran más de la mitad de la faena de bovinos del país. Asimismo, está el proyecto de Marfrig, un gran competidor en la exportación de carne.
En Katueté, Canindeyú, está pendiente la planta de carne porcina, que cuenta con capital de Concepción.