23 abr. 2024

Otro inicio de clases entre los escombros y aulas deterioradas

Retrasos en obras, escuelas abandonadas y aulas improvisadas marcan el comienzo de un nuevo año lectivo. Un millón y medio de escolares vuelven a clases. El Gobierno dice que ya entregó kits.

Llena de escombros se encontraba ayer la escuela Coronel Felipe Toledo, de la zona de Las Mercedes, ubicada en las inmediaciones del Jardín Botánico. Los docentes prepararon las aulas para recibir a los chicos en medio de una obra de G. 1.000 millones y cuya palada inicial lleva como cuatro años de retraso.

Recién el lunes pasado el Municipio asunceno dio la orden para el comienzo de los trabajos de remodelación, argumentando que no pudo iniciarse en vacaciones de verano. Teniendo en cuenta que el plazo de ejecución es de 180 días, de comenzarse en noviembre del 2018, las construcciones estarían por la mitad a estas alturas. Ahora deberán aguardar las refacciones hasta casi fin de año.

“Lo bueno se hace esperar”, manifestaron las profesoras, trabajando por adornar los espacios que utilizarán durante la construcción.

Los alumnos del noveno grado deberán dar clases en un tinglado, debido a las obras municipales (Fonacide).

Otros compartirán dos grados en una misma sala.

La vicedirectora Margaret Mendoza confirmó que desde hace cuatro años que esperan las reparaciones de parte de la Comuna capitalina.

“Vale la pena (aguantar escombros y polvo), durante los trabajos”, expresó.

Alrededor de 300 niños y jóvenes están matriculados para este curso lectivo, desde el jardín hasta el noveno.

Deterioro. En pésimo estado se encuentra la estructura de la escuela República Bolivariana de Venezuela, ubicada en la zona del barrio Trinidad.

Los pisos de las aulas están llenos de baches, las paredes con humedad y todo el establecimiento se inunda cuando hay precipitaciones.

También se observan tejas a punto de desprenderse o que están muy separadas dejando entrever la luz del sol.

Los pizarrones de algunos salones están agrietados y faltan ventiladores para combatir el intenso calor.

“Queremos que el ministro, que seguramente recorre, salga más a mirar las escuelas como la nuestra. Realmente las necesidades son muchas y apenas hay recursos para parches”, lamentó Vidalina Gabriaguez, abuela de uno de los alumnos de la institución.

El director José Sosa comentó que apenas reciben G. 2.300.000 al año en concepto de gratuidad, dinero que se esfuma con la compra de papeles y artículos de limpieza.

Es uno de los primeros establecimientos educativos de la capital, que cumple más de 120 años de su fundación.

El director comentó que desde que surgió la Ley del Fonacide, allá por el 2012, solicitan refacciones, pero no recibieron respuestas aún.

También pidieron la ayuda del MEC. Uno de los dramas para la falta de inversión de parte de la entidad estatal es que el título de propiedad está a nombre de la Municipalidad, pero luego de gestiones se consiguió el documento en favor del Ministerio.

sin aulas móviles. Pese a que el ministro de Educación, Eduardo Petta, prometió la instalación de salas móviles en las escuelas con necesidades de urgencia, estas no llegaron a la escuela República Oriental del Uruguay. La directora del centro, Celia Ayala de Velázquez, contó que ya hicieron el pedido respectivo.

Es que el sector más antiguo está muy deteriorado y la Municipalidad construirá nuevos salones de clases.

Por cierto, el director de Fonacide de Asunción, Christian Meyer, afirmó que las obras en Uruguay comenzarían antes del comienzo de las clases, pero no cumplió.

Kits incompletos. A través de audios de WhatsApp, remitidos por supervisores a directores de escuelas públicas, se confirmó que los paquetes de útiles llegaron incompletos. Petta indicó ayer por la mañana que la repartija era del 97% y se completaría en el transcurso de la jornada.

Los directores deben buscar de supervisiones bolígrafos, lápices de papel y de colores, además de calculadoras.

500 escuelas están en situación de emergencia roja, debido al riesgo de derrumbe en todo el territorio nacional.

65% de las instituciones educativas están en pésimo estado, de acuerdo con el último reporte del Ministerio.

3,9% del PIB se invierte en educación en Paraguay, una de las más bajas de la región. Unesco a conseja el 7%.

50% de los docentes recién fueron capacitados por el Estado en los últimos dos años. Así vuelven a clases.

106.000 jóvenes de 13 a 17 años están excluidos del sistema educativo,según datos de la Encuesta de Hogares.

San Pedro: Alumnos irán a escuela sin agua ni baño
Carlos Aquino
SAN PEDRO
Alumnos de una escuela de Villa del Rosario iniciarán las clases en viejas aulas con techo de chapa, sin ventiladores, agua ni baños, además de los muebles totalmente destruidos.
Se trata de la Escuela Básica Nº 2.708 Ernesto Caballero de la compañía Kerambu, 2ª Reconstrucción de Villa del Rosario, Departamento de San Pedro.
Esta institución se encuentra con la infraestructura totalmente deteriorada, con techo de chapa, los ventiladores ni siquiera funcionan, mobiliarios inservibles, paredes que van cayendo a pedazos y lo más grave: los alumnos que estudian en este lugar deben sacar agua de un antiguo pozo porque no cuentan con agua potable y el baño con letrinas.
Los padres ya recurrieron al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) y a la Municipalidad, pero no hay respuestas nuevas porque cada año el argumento esgrimido por las autoridades es el mismo: “Existen muy pocos alumnos para invertir en mejoramiento”. “Estamos prácticamente resignados a que esto se va a cerrar; está visto que no van a mejorar la institución porque hay pocos alumnos. Eso es cierto, el año pasado comenzamos con 20, pero culminamos con 12”, señaló María Dolores Benítez, presidenta de la Asociación Cooperadora Escolar.
Tras una publicación realizada por ÚH, días atrás fueron hasta la escuela algunos funcionarios del MEC, pero todo quedó allí, según los padres.
Las familias están preocupadas porque si se cierra la institución educativa, los alumnos deberán ir a la escuela del centro de la ciudad, a unos 7 o 10 kilómetros, lo que será muy difícil, teniendo en cuenta que apenas llueve y el camino queda intransitable por semanas enteras, expresaron.