AFP y EFE
MADRID/ASUNCIÓN
Un nuevo caso de corrupción golpea al Gobierno del socialista Pedro Sánchez en España. Otro escándalo mayúsculo que socava aún más la credibilidad de su liderazgo.
Esta vez fue el número tres del gobernante Partido Socialista español (PSOE), Santos Cerdán, quien tuvo que renunciar a su escaño del Congreso de los Diputados luego de haber sido implicado en un caso de coimas.
Este jueves, Sánchez pidió “perdón”, se negó a dimitir y a convocar a elecciones, como reclaman los partidos de oposición y los cientos de manifestantes que anoche se congregaron frente a la sede del PSOE en Madrid.
Un juez del Tribunal Supremo reveló un informe policial que muestra “consistentes indicios acerca de la posible participación” de Cerdán junto al ex ministro de Sánchez, José Luis Ábalos y el cercano asesor de este, Koldo García Izaguirre, “en una adjudicación indebida” de contratos públicos a cambio de dinero. Cerdán fue citado a declarar el 25 de junio.
ESPOSA, HERMANO Y OTROS. Este es el último episodio de una ya larga lista de casos judiciales en el entorno cercano de Sánchez: Su esposa, Begoña Gómez, es investigada por presunta corrupción y tráfico de influencias; su hermano, David Sánchez, será juzgado por presunto tráfico de influencias por su contratación en una institución pública; y el fiscal general, nombrado por el gobierno, quedó a un paso de sentarse en el banquillo por filtrar documentos judiciales contra la oposición.
El mismo Pedro Sánchez esta semana tuvo un revés judicial por un posible conflicto de intereses al aprobar el rescate de la aerolínea Air Europa en 2020.
Se indagará si el jefe de Gobierno incurrió en conflicto de intereses cuando dirigió el Consejo de Ministros que a finales de 2020 aprobó el rescate por 475 millones de euros de la línea aérea española.
El tribunal respondió así a una solicitud del Partido Popular (PP), que asegura que cuando se decidió el rescate, el propietario de Air Europa, el grupo turístico español Globalia, patrocinaba proyectos de la esposa de Sánchez, Begoña Gómez.
REACCIÓN DE VOX Y PP. El líder del partido Vox, Santiago Abascal, quien se encontraba de visita en Paraguay, canceló su agenda para regresar a España y pidió una moción de censura tras conocerse el escándalo.
Sin embargo, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, pidió elecciones tras las “insuficientes” y “decepcionantes” explicaciones de Pedro Sánchez, pero descartó presentar una moción de censura porque no quiere darle “un balón de oxígeno” el jefe del Ejecutivo.
En España, la moción de censura contra un presidente del Gobierno tiene que ser constructiva, es decir, el partido que la presente debe ofrecer un candidato alternativo, que debe contar con la mayoría del Congreso de los Diputados para echar del gobierno a quién esté, y el PP no tendría, de momento, los votos, ya que solo lo secundaría Vox.
Santos Cerdán está involucrado en un caso de corrupción en el que uno de los protagonistas es José Luis Ábalos, influyente exministro de Transportes de Pedro Sánchez.
Ábalos es sospechoso de haber cometido delitos de integración en organización criminal, tráfico de influencias, cohecho y malversación en relación con contratos adjudicados durante la pandemia.
