Un nuevo careo se dio entre los senadores colorados Enrique Riera y Rodolfo Friedmann por las denuncias sobre irregularidades en la ciudad de San Rafael del Paraná, relacionadas con la merienda escolar. Riera hizo una descripción detallada sobre casos de corrupción, que incluyen la construcción de un “baño de oro”, que habría costado más de G. 100 millones.
Pero agregó que “la perla de esto” era que nuevamente estaba involucrada la empresa de Friedmann y del diputado Éver Noguera en la provisión de la merienda escolar.
Friedmann dijo que ni siquiera tenía la mínima idea de cómo llegar a “San Pedro del Paraná”, y Fernando Lugo le corrigió de que se trataba de San Rafael del Paraná.
Para el abdista, lo de Riera ya se trata de una cuestión personal, y trata de encontrar siempre algo en su contra.
Riera negó que se trate de un ensañamiento, que la gente está harta de la corrupción, y que va a seguir denunciando hasta que muera.
“Este no le representa ni al vecino”, agregó Friedmann sobre su correligionario, y le invitó a denunciar juntos.