Cabe recordar que los clubes de fútbol, a través de la Ley 6960/2022, pasaron a ser incluidos recientemente como sujetos obligados (SO) de la Ley 1015/97 “Que previene y reprime los actos ilícitos destinados a la legitimación de dinero o bienes”. Al respecto, René Fernández, titular de la Seprelad, indicó que el ente antilavado propuso un plan de trabajo para confeccionar en consenso la reglamentación antilavado que regirá para este segmento, en un proceso que prevé finalizar para el primer trimestre de 2023.
Para el efecto, se deberá proceder a la identificación de los principales riesgos de lavados que son inherentes a la actividad de los clubes deportivos, explicó Fernández. “La nueva ley focaliza particularmente a los clubes (como SO) y a partir de un diálogo con la APF vimos la necesidad de hacer una presentación de un plan de trabajo, de tal forma que los asociados tengan conocimiento de cuál va a ser nuestro enfoque y los hitos que vamos a ir generando”, comentó.
Mientras tanto, los clubes se seguirán rigiendo por lo que establece la normativa que rige para las organizaciones sin fines de lucro (OSFL), donde estaban incluidos los clubes anteriormente. Por su parte, Robert Harrison, titular de la APF, aseguró que los clubes deben tener “el mayor compromiso” para las buenas prácticas antilavado.
El titular de Seprelad anunció un plan de trabajo para elaboración de norma que regirá para los clubes deportivos en el país. La reglamentación antilavado se prevé para los primeros meses de 2023.
Notorio riesgo
Durante la charla de ayer, Carmen Pereira, viceministra de la Seprelad, hizo mención a los riesgos que existen sobre el ingreso y legitimación de dinero sucio a través de clubes deportivos, considerando casos vistos en el plano internacional. “El fútbol es un vehículo que puede llevar a un lavado de activos”, expresó, al tiempo de resaltar la importancia de ajustar controles.