Por Lucho Alvarenga
lucho@uhora.com.py
El ingeniero Juan Ramón Ibarra del Prado presentó ayer renuncia como presidente de la Compañía Paraguaya de Telecomunicaciones (Copaco SA).
Lo reemplaza en el cargo el ingeniero Jorge Magno Candia, quien venía desempeñando el cargo de director de Recursos Humanos de la telefónica estatal.
La salida de Ibarra fue a través de la renuncia y no la destitución que exigió el bloque opositor y la disidencia colorada.
No obstante, el presidente igual logró superar el bloqueo impuesto por opositores y disidentes colorados a sus proyectos ?la mayoría de ampliaciones presupuestarias y otras de créditos? varados hasta tanto se produjera la salida del citado funcionario.
El conflicto se inició luego del rechazo de Ibarra del Prado a cumplir con la disposición constitucional que lo obliga a comparecer ante cualquiera de las cámaras para ser interpelado.
Sin embargo, en su escrito de renuncia, el ex titular de Copaco sostiene que su renuncia obedecía a lograr la armonía para “el normal funcionamiento de las instituciones”.
Alega que los legisladores hicieron primar su interés particular por destituirlo del cargo, antes que el general de tratar los proyectos de interés general.
En conversación con la prensa, Ibarra del Prado sostiene que los intereses que rodearon a su caso, como la pelea con su cuñado Óscar Salomón, titular de Diputados, ya quedaron de lado.
Asimismo, refirió que en la denuncia sobre supuestas irregularidades del contrato con la empresa T-Systems, no es de su gestión, aunque la denuncia lo señala como responsable de haber firmado la adenda que fue declarada ilegal por Hacienda.
PROYECCIÓN. En otro orden, la salida de Ibarra del Prado deja en condiciones políticas más favorables al presidente de la República.
Esto a partir de que hoy destrabará una veintena de proyectos de ampliaciones presupuestarias para diversos entes, desvía la atención en la denuncia de supuestos hechos de corrupción en Copaco.
Igualmente, el oficialismo ayer logró que se apruebe una nueva y millonaria ampliación destinada a los sintechos, bajo fuerte sospecha de ciertos sectores de la oposición, de que “será destinada a financiar la campaña electoral”.
Por su parte, el diputado de Patria Querida, Carlos Soler, señaló que el cambio en Copaco no cambia nada.
“Nicanor solo gana más desprestigio porque no transparenta nada para seguir usando la Copaco como caja negra”, sentenció.