Debido al pésimo estado de conservación de la supercarretera Mariscal López, 14 presidentes de junta municipales de los municipios del norte de Alto Paraná y Canindeyú formaron una mesa de trabajo y resolvieron solicitar una audiencia con Arnoldo Wiens, titular del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones.
Además, se anuncia una gran movilización ciudadana el próximo 2 de marzo, a la altura del distrito de Nueva Esperanza, Canindeyú, con el objetivo de llamar la atención del Gobierno Nacional de manera de buscar una solución al problema que representa para miles de conductores que a diario ponen en riesgo su vida al circular por la supercarretera, que en muchos tramos parece haber sido bombardeado, de tantos agujeros de tiene.
Para explicar la situación se remitió una nota al titular del MOPC, en la cual se menciona el estado de abandono en que se encuentra la supercarretera a lo largo y ancho del tramo que une a la ciudad de Hernandarias y el cruce Karambey –distrito de Katueté– como así también el tramo de la ruta 10 Las Residentas que une el distrito de Guayaibí (calles 6.000) con Salto del Guairá.
“Los departamentos de Alto Paraná y Canindeyú son regiones eminentemente productivas y grandes generadores de renta al país, por ello ponemos de resalto que son merecedoras de carreteras en buen estado”, señala el escrito.
Solicitan el ministro Wiens que realice las gestiones necesarias para que se pueda hacer efectivo el recapado de los tramos señalados. “El estado en que se encuentra la capa asfáltica constituye potencial peligro, debido a que los conductores realizan maniobras peligrosas para evitar o desviar los pronunciados baches que se han multiplicado en los últimos tiempos, además del daño mecánico que provoca a los vehículos y los varios accidentes y hasta inclusive muertes que se han registrado por la causa mencionada y que usted puede observar en las fotografías que adjunta”, añade.
BACHEO. Debido a la urgencia, la Municipalidad de Hernanda-rias realizó esta semana trabajos de bacheo cubriendo aquellos agujeros más grandes. Lo mismo hicieron trabajadores taxis-tas en la zona de Santa Fe del Paraná, donde taparon con cemento algunos de los baches más profundos y peligrosos. Saben que no es la solución, pero al menos es un parche que puede salvar la situación por algunos días. EC y WF.