Para evitar el ingreso de personas que causan daños a la fauna y a los árboles de la reserva boscosa del Jardín Botánico, desde ayer la policía montada recorre el perímetro colindante al barrio San Francisco, de Zeballos Cué.
La directora del zoológico, Maris Llorens, indicó que pese a contar con un plantel de más de cien empleados, entre guardias, guardaparques y administrativos, no pueden evitar que sucedan algunos asaltos y ataques a visitantes por lo que se solicitó la presencia de la policía montada sábados, domingos y feriados.
Las vallas de seguridad son violentadas por los desconocidos que ingresan a la reserva y ante esta situación el concejal Elvio Segovia presentó la semana pasada una minuta para la construcción de un vallado de seguridad entre la reserva y el barrio San Francisco.
Señaló que el vallado es un compromiso asumido por la Itaipú, como compensación por la instalación de unas mil viviendas en el referido núcleo poblacional, por eso la Junta resolvió remitir una nota a las nuevas autoridades de la Binacional para la construcción del cerco de protección.
