“Ha sido un placer reunirme con el secretario Tillerson. Tuvimos un intercambio abierto sobre los muchos temas que estamos tratando”, señaló Mogherini en un comunicado, tras el encuentro en la sede del Departamento de Estado.
La jefa de la diplomacia europea remarcó, además, que “la UE y EE.UU. tienen una relación duradera” y trabajarán para avanzar en ella con base en sus “principios e intereses”.
Entre los temas tratados, añadió, figuraron “el desafío común de la lucha contra el terrorismo, el continuo trabajo para fortalecer la defensa europea, las relaciones con Rusia, el acuerdo nuclear con Irán y las principales crisis, desde Ucrania a Siria”.
Se trata de la primera reunión de los jefes de la diplomacia europea y estadounidense desde que el presidente Donald Trump tomara posesión del cargo el pasado 20 de enero.
Las relaciones entre el Gobierno de Trump y la UE no han tenido un inicio positivo debido a las críticas vertidas desde Europa a la prohibición de entrada a EE.UU. de ciudadanos procedentes de siete países de mayoría musulmana y la insistencia del mandatario estadounidense de construir un muro en la frontera con México.
De hecho, la semana pasada en Malta, el bloque europeo expresó en una cumbre informal su “preocupación” por algunas decisiones y actitudes del Gobierno de Trump, en palabras del primer ministro maltés, Joseph Muscat, cuyo país preside este semestre la UE.
Por su parte, Trump ha insistido en la necesidad de que Europa aumente el gasto en defensa y ha levantado suspicacias en Bruselas al afirmar que el voto a favor de la salida británica del bloque europeo, conocido como “brexit”, tendrá efectos positivos.
Además de la reunión con Tillerson, a quien Mogherini invitó a Bruselas, la jefa de la diplomacia europea tuvo diversos encuentros en el Congreso de EE.UU., entre ellos con los senadores Bob Corker, presidente del comité de Relaciones Exteriores del Senado, y Ron Johnson, que encabeza el de Seguridad.
Para hoy también está previsto que se vea en la Casa Blanca con el consejero de seguridad, Michael Flynn, y el asesor presidencial y yerno de Trump, Jared Kushner.
Mogherini concluirá su visita este viernes con una rueda de prensa y una conferencia en el centro de estudios Atlantic Council, en el que delineará los ejes de las relaciones bilaterales.
La visita de Mogherini se produce un día después de que el comisario europeo de Inmigración, Dimitris Avramopoulos, se reuniera con el secretario de Seguridad de EE.UU., John Kelly.
Son los primeros encuentros de alto nivel de los Ejecutivos de Bruselas y Washington y preceden al viaje a Múnich y Bruselas del vicepresidente estadounidense, Mike Pence, a finales de mes.
Pence se reunirá en Bruselas con representantes europeos y de la OTAN, un encuentro especialmente sensible después de que Trump tildara al órgano de defensa transatlántico de “obsoleto”.
El presidente estadounidense confirmó el pasado domingo que viajará a la cumbre de la OTAN de mayo próximo, tras conversar por teléfono con el secretario general de la alianza atlántica, Jens Stoltenberg.
Por el momento, Trump no ha anunciado cuál será su primer viaje internacional, pero sí que ha aceptado la invitación de la primera ministra británica, Theresa May, para ir a Londres tras el encuentro entre ambos en la Casa Blanca a finales de enero.
Alfonso Fernández
