“Los próximos meses serán de grandes desafíos para todos. Uno de ellos es conciliar la protección de la salud de las personas con el imperativo de recuperar la economía”, dijo el presidente brasileño Jair Bolsonaro, criticado por su gestión de la pandemia y cuyo país es el segundo más afectado del mundo por el Covid-19, con más de 63.000 muertos y arriba de los 1,5 millones de casos. “Tengo certeza de que el Mercosur es parte de las soluciones que construimos”, agregó en la cita donde Paraguay dio a Uruguay la presidencia pro témpore del bloque.
América Latina es en este momento epicentro de la pandemia, que infectó a más de 11 millones de personas en el mundo y se cobró más de 523.000 vidas.
De su lado, el presidente argentino Alberto Fernández, que puso su empeño en frenar el avance del virus pese a sus devastadores efectos sobre la economía y acaba de reforzar las medidas de aislamiento social, aseveró que “aquí nadie se salva solo”, en alusión a una frase del papa Francisco.
“Somos el continente más desigual en la distribución del ingreso y nos toca afrontar ese desafío (del Covid-19) sabiendo que estamos ante la mayor crisis mundial”, expresó.
Los cuatro presidentes del Mercosur se comprometieron en revisar el arancel externo común con miras a la consolidación de la unión aduanera. Fernández, Bolsonaro, Mario Abdo Benítez (Paraguay) y Luis Lacalle Pou (Uruguay) aplaudieron los avances para adecuar el sector automotor a la unión aduanera y la realización de la reunión “ad hoc” del sector azucarero. AFP