El alto volumen vendido en el primer cuatrimestre de este año a más de 20 destinos, siendo los principales compradores Japón, Países Bajos y Turquía, responde a un importante remanente la campaña anterior que se colocó en los primeros meses de este 2021. En total ingresaron al país por la exportación de estas semillas USD 9,3 millones.
El presidente de la Cámara Paraguaya de Exportadores de Sésamo (Capexse), Gilberto Ozorio, estima que esta tendencia irá disminuyendo en los próximos meses, debido a la merma en la producción en la campaña 2020-2021 como consecuencia principalmente de la sequía.
En ese sentido explicó que de las 30.000 toneladas de sésamo confitero que suele producir la agricultura familiar campesina, el volumen bajó a 20.000, en tanto que la superficie manejada de forma mecanizada alcanzó 18.000 toneladas.
La mayor cantidad de sésamo está en manos de los pequeños productores, quienes para empezar los cultivos reciben mediante un contrato las semillas de las empresas privadas, que por su parte tienen el compromiso de comprar la totalidad de la producción a un precio acordado previamente. De esta manera los agricultores tienen un mercado e ingreso seguro a través de este rubro.
“Hace varios años que hay una estabilidad en la relación con los productores, de la mano de un trabajo coordinado de varios sectores y de nuestra parte, garantizando precios base que permiten que sea rentable la producción”, señaló al respecto Ozorio.
En cuanto a los precios mínimos, este año los agricultores están recibiendo G. 5.000 por kilo, monto al que se descuenta el 1% de retención que establece la reforma tributaria.
Si bien las exportadoras brindan asistencia técnica a los productores, la secretaria de la Federación Nacional Campesina, Teodolina Villalba, reclama que no es suficiente y que la responsabilidad la tiene el Ministerio de Agricultura y Ganadería.
9,3
millones de dólares ingresaron al país por la exportación de sésamo en los primeros meses de este año.