“El presidente ha sido particularmente claro sobre sus intenciones para el 2 de abril, que será un gran día para nuestro país”, dijo Leavitt. “Entrarán en vigor aranceles importantes”, añadió.
Las tarifas aduaneras “recíprocas” consisten en gravar los productos de un país que entran en Estados Unidos al mismo nivel que el que ese Estado aplica a los bienes estadounidenses.
A principios de esta semana, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, dijo que Washington podría suspender los aranceles recíprocos si los países detienen las prácticas que considera injustas.
SE PUBLICARÁ LISTA. El gobierno “publicará la lista de aranceles aduaneros aplicados por otros países”, informó Bessent. “Vamos a ir y decirles, miren, aquí es donde creemos que están los niveles de tarifas, las barreras no arancelarias, la manipulación de la moneda, la financiación injusta, la supresión laboral”, declaró.
Si renuncian a estas prácticas, añadió, “no levantaremos el muro arancelario”.
Las barreras no arancelarias pueden incluir regulaciones que cierran de hecho un mercado a los productos de otro país producidos con normas diferentes, así como otras prácticas como las subvenciones que reducen artificialmente el coste de producción.
Donald Trump las considera “injustas” y denuncia que esquilman la economía estadounidense por saltarse las normas del libre comercio.
Durante su campaña defendió el uso de aranceles como medio para financiar el presupuesto del gobierno federal, proteger algunas industrias y reequilibrar la balanza comercial.
Desde que regresó a la Casa Blanca el 20 de enero ha utilizado esta herramienta como medio de presión sobre países como Canadá, México y China, a los que ha acusado de no hacer lo suficiente para combatir el tráfico de fentanilo, un opioide sintético que ha causado una grave crisis sanitaria en EEUU. AFP