El británico Lewis Hamilton (Mercedes) completó el podio, con el tercer lugar, gracias a los abandonos de los dos Red Bull, el del neerlandés Max Verstappen (vigente campeón mundial) y el del mexicano Sergio Pérez, debido a averías en las tres últimas vueltas.
Ferrari, que confiaba en el cambio de reglamento técnico que entra en vigor este año para olvidar dos años sin victorias (desde el GP de Singapur de 2019), empieza así de la mejor manera y lanza oficialmente su candidatura al título.
En el plano personal, el monegasco Leclerc, que había salido desde la pole position, consigue además una revancha respecto a lo que vivió en Baréin en 2019, cuando iba directo hacia su primera victoria en la F1, antes de ser traicionado por su motor.