Latorre hizo el anuncio por medio de la red social X, al señalar que la decisión obedece a un proceso de modernización que implica optimizar los gastos de la institución a su cargo.
“Siguiendo el proceso de modernización del organigrama de Diputados he suprimido el departamento de cafetería. Seguiremos en la dirección de la optimización del gasto público en la Cámara de Diputados”, expresó.
La resolución administrativa 1351 resolvió suprimir el departamento en cuestión dependiente de la Dirección de Servicios Generales.
En el art. 2° señala que se pretende actualizar y aprobar la Estructura Organizaciones y el Manual de Organización y Funciones.
Gasto superfluo. El referido departamento gozaba de una jefatura a la que se destinaba un salario de G. 13 millones.
Pese a este cargo que básicamente era inventado dado que además en la Cámara existen varios mozos que realizan las tareas inherentes a la cafetería, la Cámara recientemente adjudicó la adquisición de la bebida estimulante por valor de G. 200 millones. Lo hizo en dos etapas: Una para la compra de café y la otra, para comprar leche y chipitas.
Tras la indignación en redes debido a este gasto, la Cámara justificó diciendo que en comparación a años anteriores, Diputados redujo al mínimo el gasto en este rubro.
Finalmente, algunos diputados pidieron explicaciones a la mesa directiva sobre este tema. Latorre, en respuesta, decidió suprimir el servicio de cafetería
Proyecto Esgaib con el pulgar abajo. Por otra parte, el proyecto de ley de “devolución premiada” iniciativa del diputado Yamil Esgaib, que fue rechazado de forma unánime en el Senado y que fue devuelto a Diputados para su ratificación o rechazo, ahora tiene menos adeptos. El líder de la bancada B, diputado Hugo Meza manifestó su rechazo rotundo al proyecto de su colega. Dijo que ya lo rechazó y lo volvería a hacerlo porque lo considera como un “delirio que hace poco favor para construir más transparencia”.