16 jun. 2025

Latinoamérica no será prioridad para los EEUU

La región fue uno de los grandes ausentes en el intenso debate electoral norteamericano, tanto como un tema que interesa a los hispanos provenientes del sur del río Bravo: la reforma de inmigración.

Por Néstor Ikeda, de AP
WASHINGTON, EEUU.
Con el demócrata Barack Obama en la Casa Blanca, es poco probable que Latinoamérica figure entre sus prioridades en materia de política exterior.
La región ha estado ausente del debate electoral, tanto como un tema que interesa a los hispanos provenientes del sur del río Bravo: la reforma de inmigración.
En la campaña electoral, la más larga, costosa y disputada de tiempos recientes, McCain estuvo un poco más cerca de la región e incluso visitó Colombia y México para hablar de continuidad de las políticas de libre comercio, mercados abiertos y posición dura contra líderes totalitarios que ha caracterizado al gobierno republicano saliente.
Obama, quien nunca ha estado en un país latinoamericano, ha centrado su discurso, como McCain, en temas de gran preocupación para el público estadounidense: las guerras en Irak y Afganistán y, más recientemente, la crisis financiera global.
Abierto opositor del tratado de libre comercio (TLC) con Colombia, que está pendiente de aprobación legislativa junto a los de Panamá y Corea del Sur, Obama ha hablado también de una revisión del TLC con México, vigente desde hace casi 15 años.
McCain se oponía a levantar el embargo comercial y otras sanciones impuestas a Cuba hace más de medio siglo y ha criticado a los gobiernos de Hugo Chávez (Venezuela) y los hermanos Fidel y Raúl Castro (Cuba) por su falta de libertades individuales.
“NUEVA ALIANZA”. Obama, en cambio, ha ofrecido levantar ciertas sanciones impuestas por Bush a Cuba, aunque no el embargo, así como permitir viajes de familia y envío de remesas ilimitado a Cuba, a fin de que “los familiares (de exiliados cubanos) sean menos dependientes del régimen de los Castro”.
El demócrata ha hablado también de una “nueva alianza de las Américas” (New Partnership for the Americas), en la cual puedan ejercerse las libertades sin restricciones y darse un diálogo “sin precondiciones” con todos los gobiernos de la región, una posición que Chávez ha recibido de buena gana llevándole a decir que acudiría a un diálogo con Obama si fuese invitado, algo que no quiso hacer con Bush.
Es probable que sobre esa posición, Chávez tome la iniciativa para reabrir las relaciones con Washington, interrumpidas desde setiembre. Lo mismo podría esperarse del presidente Evo Morales, en Bolivia, cuya decisión de expulsar al embajador estadounidense por presunta intervención en asuntos internos recibió la solidaridad de Chávez.
McCain fue un fuerte impulsor de la reforma inmigratoria el año pasado, pero curiosamente la forma como respondió su partido obró en su contra en las elecciones debido a que sus legisladores tumbaron el proyecto hasta en dos ocasiones en el Congreso.
Obama ha hablado casi en los mismos términos que McCain: ha dicho que desearía que los indocumentados se conviertan eventualmente en ciudadanos si pagan impuestos y una multa, aprendan inglés y se sujeten a las leyes de la nación.
De cualquier forma en febrero habrá una gran oportunidad de decir a la región lo que realmente va a hacer como presidente: la cumbre presidencial de las Américas en Trinidad y Tobago.
A las cuatro cumbres precedentes nunca asistió el líder cubano porque no fue invitado.
Ahora queda abierta la gran pregunta: ¿Obama invitaría a los hermanos Fidel y Raúl Castro a Puerto España?
GOBERNACIÓN DE PUERTO RICO PARA LUIS FORTUÑO
El gobernador de Puerto Rico, Aníbal Acevedo Vilá, del Partido Popular Democrático (PPD), aceptó su derrota en las elecciones celebradas ayer, en las que fue superado por el candidato del Partido Nuevo Progresista (PNP), Luis Fortuño.
“Quiero en este momento felicitar al gobernador electo, el señor Luis Fortuño”, dijo Acevedo Vilá rodeado de seguidores a las afueras de la sede de su partido en San Juan.
El gobernador saliente, que dejará el cargo en enero, hizo estas declaraciones cuando la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) había contabilizado menos de un 20 por ciento de los votos emitidos en los comicios para elegir gobernador, legisladores y alcaldes.
Para estas elecciones estaban registrados 2.458.036 votantes.
A las 19.30 hora local (23.30 GMT), la CEE daba el 53,06 por ciento de los votos a Fortuño y un 41,43 a Acevedo Vilá.