Sin cumplir mayores funciones, cada concejal departamental recibe altos montos en concepto de pasajes, viáticos, combustible, dieta, gastos de representación y otros (ver infografía), actuando de forma similar al Parlasur, que se quiere eliminar mediante un proyecto.
En total, el Estado mantiene 246 concejales departamentales, que en total generan un gasto de más de G. 48.000 millones.
La diputada del Partido Encuentro Nacional (PEN) Kattya González anunció que presentará un proyecto para reducir al mínimo la cantidad de miembros de las juntas departamentales, que sería siete, alegando que estos no cumplen una función legislativa, sino deliberativa, y ni siquiera aprueban el presupuesto de las gobernaciones.
“Muchos gobernadores lo que hacen es silenciarles a sus juntas dándoles viáticos, entonces ellos no molestan, porque una de las pocas funciones que sí tienen las juntas departamentales es pedir la intervención de la Gobernación. Pero nunca se da, y eso se tiene que dar si es que trabajan, porque ellos tienen que trabajar para poder pedir la intervención y el control, pero como no lo hacen, porque ni entienden lo que tienen, ya que no aprueban su presupuesto, entonces este es el sistema con el cual funcionan. Yo ya no entiendo este tema de dar a todos los políticos combustible, yo recorro hospitales donando mi cupo y no hay combustible ni para las ambulancias”, manifestó la legisladora.
Las juntas departamentales están establecidas por la Constitución Nacional, por lo que no pueden ser eliminadas; entonces, González propone que en lugar de elegir concejales departamentales, que cada municipio que integre la gobernación envíe su representante. “Por ejemplo, Central tiene 19 municipios, en lugar de tener 21 concejales departamentales, independientes, que cada distrito tenga un miembro al frente, entonces nos evitamos pagar salarios, y tenemos un criterio más efectivo, porque todos los municipios estarán representados”, resaltó.
La diputada comentó que son órganos “que llevan muchísimo dinero” y que están formados por “cupos políticos” que son innecesarios.
Según el planteamiento, se podrá pagar un viático para cada concejal electo de la Junta y el gobernador podrá tener la visión de todas las necesidades de cada distrito.