23 ago. 2025

Laboratorio cambiará drogas oncológicas por G. 521 millones

Los medicamentos para el Instituto Nacional del Cáncer correspondientes a la licitación 15/11, que tienen fecha de vencimiento entre setiembre y noviembre de este año, serán cambiados por el Laboratorio Fusa SA, a través de un acuerdo al que se llegó ayer con el Ministerio de Salud Pública (MSP), por valor de 521.619.900 guaraníes.

Vencidos.  Los medicamentos se encuentran depositados en el banco de drogas.

Vencidos. Los medicamentos se encuentran depositados en el banco de drogas.

Las drogas que serán cambiadas son: 550 ampollas de etopósido 100 mg, con vencimiento este mes; 3.203 frascos de oxaliplatino 100, con vencimiento entre setiembre y noviembre de este año; y 2.246 frascos de paclitaxel 150 mg, que vencen el próximo mes.

Con esta devolución ya no habrá necesidad de compra del paclitaxel, un fármaco antimicótico; la demanda quedará cubierta para el próximo año, explicó el doctor Nicolás Aguayo, coordinador del equipo interventor.

Aguayo manifestó que la posibilidad de poder contar con estas drogas oncológicas representa una reducción importante del daño patrimonial dentro de los 1 millón de dólares de medicamentos oncológicos vencidos que se encuentran en el banco de drogas del Instituto Nacional del Cáncer y en el depósito de San Antonio del Ministerio de Salud Pública (MSP), que serán incinerados en breve.

Se irán cambiando y entregando de acuerdo a la necesidad de la institución. El intercambio se hará desde setiembre y hasta diciembre de este año. La carta compromiso indica que la entrega se hará cada tres o cuatro meses, con un vencimiento no menor a 18 meses desde la entrega.

El interventor explicó que, en caso de que se encuentren medicamentos vencidos entre julio y agosto, también se verá la posibilidad de cambiarlos, aunque ya sea responsabilidad de la administración anterior. Para este trámite se reunirán el próximo lunes los interventores con los representantes de la empresa proveedora.

Contrato. Sobre el contrato firmado para la compra, Aguayo afirmó que presenta debilidades con relación a la entrega de las medicinas, como que la segunda entrega, en vez de decir hasta 60 días, debería ser 60 días después de la primera entrega.

“Si entregaste a los 20 días, a los 22 ya se puede hacer la segunda entrega. El 50% decía entre 60 y 360 días de la firma del contrato; eso significa que la empresa, con todo el derecho, si entregó a los 60 días, a los 65 días ya puede hacer la otra entrega. Habilita el contrato al no decir a los 360 días de la última entrega y al no darle la posibilidad entre 60 y 360 días”, explicó Aguayo.

Recordó que, de todas formas, se tenía una seguridad, que era la entrega según el requerimiento de la institución. “Eso creo que fue lo que no se cumplió”, dijo. Otra debilidad apunta a los vencimientos, que son menores a 12 meses cuando deberían ser a 22 meses. “Los cálculos no son exactos y por eso hay que jugar con la fecha de vencimiento, la más larga posible, para que así no venzan”, agregó.