La política monetaria en Argentina, en particular las altas tasas de interés que convalida el Banco Central para mantener a raya el precio del dólar, avivó las discusiones entre los candidatos presidenciales en la recta final de la campaña para las primarias del 11 de agosto.
La mecha del debate la encendió el peronista Alberto Fernández, principal postulante de la oposición, quien, de llegar a la Casa Rosada, promete dejar de pagar los millonarios intereses que cobran los bancos del sistema financiero local por sus tenencias de Letras de Liquidez (Leliq) emitidas por el Banco Central. “Estamos en un sistema especulativo, que promueve la bicicleta financiera y jugar entre las Leliq y el dólar para hacer enormes diferencias en desmedro de la producción y el trabajo argentino”, dijo ayer el candidato del Frente de Todos en la provincia de Entre Ríos.
Para el secretario de la Presidencia, Fernando de Andreis, la propuesta de Fernández de dejar de pagar los intereses de las Leliq, unos 60.000 millones de pesos mensuales es de corte electoral. “Hace varios meses que estamos atravesando una saludable tranquilidad en el mercado cambiario”, dijo De Andreis. Por su parte, Roberto Lavagna, peronista que defiende ideas económicas más heterodoxas y candidato a presidente por Consenso Federal, advirtió que ninguna economía del mundo puede funcionar con estas absurdas tasas de interés. EFE