24 sept. 2025

La misericordia de Cristo

Hoy meditamos el Evangelio según san Lucas 13, 10-17. La mujer que nos narra el Evangelio llevaba casi veinte años encorvada sin poderse enderezar, pero se acerca a Dios, va a la sinagoga y su enfermedad la hace humilde. Cristo, que penetra los corazones, ve en aquella mujer un alma sencilla y purificada. Se dirige a ella imponiéndole las manos y le dice: ‘Queda libre de tu mal’. Es una imagen preciosa del sacramento de la misericordia de Dios, de la confesión, en el que Jesús nos libra de las ataduras del pecado, bendiciéndonos con sus manos para librarnos del mal. ¡Qué profunda alegría la que sintió aquella mujer! Podía erguirse y levantar con facilidad la mirada al cielo. Su mirada se encontró con la mirada del Señor y lágrimas de gratitud surcaron su rostro.

El Evangelio relata a continuación la reacción airada del jefe de la sinagoga, que pone por delante de la misericordia la observancia de un precepto. Una reacción que escondía hipocresía, y que contrasta con la alegría de la gente al ver las maravillas que hacía Jesús. No quiere el diablo, el enemigo de nuestra santidad, que nos acerquemos al Corazón de Jesús y pone toda clase de obstáculos, pero hemos de reaccionar con firmeza, para ir al Señor y con sencillez mostrarle los nudos que atenazan el alma, para que los desate su misericordia.

Si guardáramos algún afecto al pecado, viviríamos encorvados sin poder levantar la vista al cielo, con la mirada baja, ocupados solo de las cosas de la tierra, como si Dios no existiese. El afecto al pecado atenaza, provoca replegamiento sobre nosotros: el horizonte de la vida se estrecha y los mejores talentos se desaprovechan. El corazón del hombre ha nacido de Dios y tiene anhelos de infinito, de él. Puede conformarse con lo efímero, pero eso no calma su sed profunda, camina en círculo, se traiciona a sí mismo y los intentos de dar alguna utilidad a su vida se van marchitando. Llenemos nuestro corazón de verdaderos anhelos que nos dan plenitud, y que nos hacen ir erguidos.

(Frases extractadas de https://opusdei.org).