Clarisa Enciso
“Nada es imposible, la propia palabra lo dice: ‘Puedo hacerlo’”, decía Audrey Hepburn, inolvidable estrella de Hollywood. La motivadora frase representa muy bien los pensamientos de Verónica Chaves (47), quien cree que es sumamente importante a la hora de cumplir un sueño mantenerse fiel a los buenos ideales e intenciones, pues todo llega a su tiempo. Sostiene que con trabajo y dedicación todo es posible, y hasta los inconvenientes más grandes son reversibles. “Vamos encontrando inconvenientes, porque para mí no son obstáculos. Cuando queremos algo siempre encontramos la manera de superarlos y si no es ahora será luego y espero que se den cuenta de que la mejor vista siempre se consigue después de una subida difícil”, indica.
EN LA VIDRIERA INTERNACIONAL
Vero es una de las figuras destacadas de la pasarela nacional. Sus primeros pasos en ese mundo se iniciaron cuando tenía 21 años, de la mano de Noemí Gómez, en la recordada agencia American International Model School. Hoy, la consideran como un ícono de la moda de los años 90. Con su cabellera dorada, ojos color mar y con un exquisito estilo, se convirtió en musa de una de las firmas más famosas del mundo: Dolce&Gabbana. Ahora forma parte del libro de fotografías producido por Domenico Dolce, marcando así una de las mejores etapas de su vida a nivel profesional. “Fue una verdadera sorpresa y honor para mí ser elegida entre las primeras Reinas del Alta Moda de Dolce & Gabbana”, expresa. Al respecto confiesa que la convocaron para un proyecto secreto y durante dos años no pudo compartirlo hasta que el libro fue publicado. “Estas son unas de las cosas más lindas que me pudo haber pasado en el ambiente de la moda que tanto me gusta. No habré salido a desfilar en esas pasarelas internacionales pero siempre me mentalicé que por lo menos asistiría a esos desfiles y ahí en su tiempo ya estaba siendo invitada”, agrega Chaves, quien en redes sociales comparte tips de belleza, moda y vida saludable, con sus más de 96.000 seguidores. Mamá y esposa
Vero está casada con el empresario Marcelo Toyotoshi, con quien, además de coincidir en sueños y gustos, comparte el amor por sus hijos Mayra y Dustin. El pasado 6 de junio la pareja celebró su 25 aniversario de unión matrimonial. El día fue muy especial para Vero, ya que su esposo la llenó de detalles románticos, entre ellos 25 arreglos florales. Haciendo un recuento, para ella compaginar la vida de madre, modelo y esposa, no es tarea fácil, pero lo supo hacer de manera ordenada y poniendo siempre a sus hijos en primer lugar. “Cuando fui mami me dediqué totalmente a eso durante los primeros meses de los chicos ya que soy de creer que, aparte de ser el momento más mágico de una mujer, es un tiempo de crear vínculos con un hijo. Confieso que fui mamá clueca, quería hacer todo con ellos; cuando los vi más seguros y que se podían adaptar bien a mi ausencia, de a poco empecé a retomar mi trabajo, por suerte no era algo de tiempo completo ni demandante, así que fue perfecto”, explica. Como esposa, se describe fiel compañera y cómplice de todo lo que hace Marcelo, compartiendo sueños, gustos y sobrellevando los obstáculos que se puedan encontrar en su paso. “Siempre digo que lo mejor que nos pudo pasar es haber sido amigos antes que novios. Compartimos muchas cosas porque valoramos el gusto y los ideales de cada uno, dar ese lugar es muy importante”, indica y agrega que no siempre todo es color se rosas. “Pero nuevamente recalco que dialogamos nuestras diferencias y buscamos la solución juntos, de eso se trata el matrimonio, de entregar y recibir, no funciona si uno solo da y el otro demanda o simplemente recibe. Con él siento eso, que nos apoyamos en lo que nos gusta y en lo que nos ayude a crecer, porque vamos cambiando con los años y es lindo ver cómo hemos superado tantas cosas juntos”, refiere Los sueños
“Dicen que los sueños no se cuentan porque no se cumplen”, señala al ser consultada sobre los que aún le faltan cumplir. Con varias metas concretadas cree que las limitaciones y barreras se las pone uno mismo y que por ello se debe dar lo mejor. “Realmente es uno mismo el que se pone límites y barreras, hice todo lo que quería hacer, lo que no fue simplemente porque no quise. Nunca pensé que podría ser modelo y me demostraron: ‘¡hey, sí podés!’. Podés ser más, exigirte un poco y ser una muy buena. Quería ser conductora de tevé, no estaba preparada en su momento, pero cuando me lo propuse lo logré. No tener conocimiento es lo que nos causa miedo, eso lleva a una inseguridad y ella a estancarnos”, sostiene. Para finalizar, agradece el cariño que recibe de sus seguidores, quienes no pierden la oportunidad de brindarle apoyo, bendiciones y amor. “Realmente es tan lindo y reconfortante recibir mensajes llenos de buena vibra, muchas personas son fanáticas de la época del modelaje”, expresa y acota que para ella haber construido una imagen diferente en ese mundo es genial. “Es lo que yo les decía a mis amigos y familia, puedo hacerlo bien y así empecé mi trayectoria. Es lo que me gusta y sigo compartiendo algo de producciones y mi vida a través de las redes, sin dejar que eso también se vuelva un medio invasivo. Recelo siempre mi privacidad”, finaliza.
MODELO E INFLUENCER. Vero Chaves, musa paraguaya de Dolce&Gabbana, comparte con ÚH sus varios logros.