La industria cárnica no ve con buenos ojos la presión de tres empresas brasileñas para comprar vacunos vivos desde Paraguay con el apoyo de los propios productores, quienes buscan opciones en caso de que los precios locales no convenzan.
“Todos los años hacen lo mismo. Nosotros vemos que no existe razón para que vayan al Brasil, nosotros tenemos suficientes plantas para faenar lo nuestro y no tenemos necesidad de ir a salvar a la industria brasileña en perjuicio de los paraguayos”, dijo al respecto Luis Pettengill, presidente de la CPC.
Se refirió al impacto del eventual envío de ganado al exterior, pues significaría una menor oferta de materia prima para los 11 frigoríficos locales de exportación y su consecuente encarecimiento, mientras que los productores atribuyen esta búsqueda de comercialización a la industria, a la que acusan de distorsionar los precios a la baja.
Sobre el punto, Pettengill cuestionó que el constante reclamo es una cotización de al menos USD 3 por kilogramo al gancho, referencia que actualmente se superó. “¿Por qué llevarías a otro país a faenar tus animales? No tiene ningún sentido, yo no creo que eso ocurra nunca”, insistió.
Entre los mayores obstáculos, mencionó que los ganaderos brasileños no estarán de acuerdo con esta medida, ya que representa una amenaza a sus negociaciones, así como tampoco cree que los productores paraguayos estarían de acuerdo en que los frigoríficos locales importen bovinos en busca de precios.
A esto se suma una serie de requisitos sanitarios exigentes para el traslado de los animales, como la cuarentena antes de su faenamiento.
Interés. Son tres las empresas brasileñas que piden la colaboración del Ministerio de Agricultura y Ganadería para importar de manera inmediata bovinos listos para faena.
La primera en oficializar su interés fue Naturafrig Alimentos, luego se sumaron JBS y Marfrig, todas ellas con unidades activas en Mato Grosso del Sur, que limita con el territorio paraguayo, que representa una ventaja para la logística y que influye fuertemente en las negociaciones, especialmente con ganaderos del Norte del país.
Las intenciones de estas firmas son tentadoras, sobre todo por la referencia de precios del Brasil, que con USD 3,59 por kilogramo lidera la lista entre los mejores compradores de la región.
Paraguay, por su parte, experimenta la mejor cotización desde el 2018, cuando el novillo alcanzó los USD 3,37 en febrero. Se espera que la tendencia alcista continúe al menos hasta el término de la vacunación antiaftosa.
Requisitos para enviar animales
Según el Ministerio de Agricultura y Ganadería, no hay restricciones para exportar ganado en pie. Solo se deben cumplir una serie de requisitos sanitarios.
El comprador primeramente debe registrarse en el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) y solicitar la habilitación de un predio para el aislamiento de los animales durante 30 días.
Luego se debe pedir la provisión de caravanas para la identificación de bovinos, la emisión de la Autorización Sanitaria y el Certificado Veterinario Internacional de exportación, entre otros.
De acuerdo al servicio sanitario, la resolución N°10/18 del Mercosur permite exportar vacunos a cualquiera de los países miembros, pero teniendo en cuenta que las exigencias varían según el destino.